Hace apenas unos días que el mundo se ha tenido que enfrentar al estallido de un nuevo conflicto bélico, en este caso, entre Israel y Palestina. Pues bien, en este sentido y como ya pasó con la guerra de Ucrania, la comunicación a través de las redes sociales se ha convertido en una herramienta informativa clave para sus ciudadanos. A través de plataformas digitales, la población, líderes y activistas se alzan, impulsando la conciencia global y movilizando apoyo. Sin embargo,la libertad de estas herramientas también conlleva el riesgo de la propagación de desinformación y polarización, acentuando divisiones.
Aun así, la existencia de plataformas como las redes sociales son muy necesarias en la comunicación en tiempos de guerra. Cabe destacar que la información que transmiten los periódicos de las zonas afectadas es tremendamente más polémica y polarizada, principalmente, en países en los que no hay libertad de prensa. Por no hablar de que los periodistas que se desplazan hasta allí para cubriri el conflicto están expuestos, arriesgan su vida para mantenernos informados.
Por tanto, si, las redes son una gran herramienta comunicativa, sin embargo el riesgo de la comunicación a través de smartphones y plataformas, es la desinformación. En tiempos tan adversos para la humanidad, todavía existen personas que se dedican a crear fake news generando más odio entre los afectados y creando espacios de diversas opiniones donde prevalecen las de aquellas personas que ni siquiera están informadas y que no sustentan sus ideas en fuentes fidedignas.
En este sentido, uno de los escenarios que está divulgando prácticamente sin control fake news sobre el conflicto que se está produciendo en Gaza es X, la red social antes conocido como Twitter. La llegada de Elon Musk ha provocado que sea más fácil consumir este tipo de información debido a que la compañía flexibilizó las reglas de la plataforma. Y es que, tras despedir a la mayoría de las personas que se ocupaban de verificar bulos, es muy difícil controlar las cuentas verificadas, aquellas que cuentan con un check azul.
Pero bien, lo que se cuenta en las redes y lo que ocurre en el campo de batalla no es lo único que tiene un alcance sin precedentes en el inicio de un conflicto bélico, Pues bien, la propaganda o la desinformación de los medios de comunicación son algunos de los recursos que se utilizan de cara al exterior para mandar un determinado mensaje. Así. se ha abierto la veda, todo el mundo emite información, desde los propios grupos terroristas hasta la sociedad civil que sale a la palestra como expertos. Además, al entrar en juego las redes sociales, los ritmos, para los medios de comunicación, se aceleran obligándoles a una busqueda de la verdad mucho más rápida y necesaria.
Ahora, es cierto que las fake news son una herramienta que ha existido siempre en este tipo de conflictos y que debe ser bien gestionada por los periodistas que dan la información. Sin embargo, hay que tener mucho cuidado con las redes sociales que a pesar de ser una gran herramienta de acercamiento al conflicto, impulsan cada vez más rápido estas noticias falsas que son utilizadas como arma de guerra para influir sobre todo de cara al exterior.
En definitiva, las redes sociales han transformado la narrativa del conflicto, poniendo en primer plano testimonios y perspectivas reales que de otro modo podrían ser silenciados. Pero, no hay que olvidar que su influencia en esta guerra refleja tanto la solidaridad como la complejidad de la comunicación en el siglo XXI.
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