En una semana repleta de polémicas en los medios de comunicación se han podido terminar de conocer algunos de los nombramientos de segundo nivel tras las tomas de posesión de los ministros de sus carteras. Pues bien, en este contexto, el viernes se confirmó la sontinuidad de Francesc Vallès al frente de la Secretaría de Estado de Comunicación.
Él mismo Vallès, ha sido el encargado de transmitir esta decisión a varios directores de medios de comunicación, de alcance nacional. Y es que, la noticia se ha ido haciendo pública a través de varias reuniones informales en las que se han abordado cuestiones relacionadas con la nueva legislatura. Pero bien, el Gobierno ha querido reiterar que este cargo se renueva bajo la premisa de empezar una relación fluida desde cero con los medios de comunicación, dejando a un lado posibles roces del pasado.
Un trabajo que ha dejado mucho que desear
Recordemos que Francesc Vallès llegó a su cargo como dircom de Moncola, ya hace más de dos años en un momento en el que Pedro Sánchez apostaba por un cambio de rumbo en el Gabinete de Comunicación poniendo fin a la etapa de Iván Redondo como Jefe de Gabinete y dando pie a nuevos cambios que afrontó Óscar López.
Pues bien, desde ese momento ha pasado ya mucho tiempo en el que Vallès, bajo un perfil más político que periodístico y por tanto, menos especializado en el mundo de la comunicación, tomó las riendas y pasó a gestionar las relaciones con la prensa. Una labor que, hasta el momento, ha dejado mucho que desear, especialmente para los medios menos afines al Gobierno.
Concretamente, bajo la anterior legislatura fueron reiteradas las situaciones en las que diferentes medios se quejaron del trato de favor de las fuentes del Gobierno a medios con una línea editorial en consonancia con su gestión. Situaciones que los medios denominaron como veto, pero que Vallès negaba y justificaba asegurando que se trataba de los criterios de acreditación, los cuales dependerían siempre de “los que estableciera el convocante en cada momento”.
Una realidad que se complicó para el responsable de los vetos que ha sufrido la prensa de nuestro país desde que llegó al cargo en 2021. Desde entonces los tratos de favor se siguieron extendiendo y normalizando, siendo habituales las denuncias de los medios de comunicación que no ejercían ni ejercen de palmeros del PSOE de Pedro Sánchez: ABC, La Razón, El Mundo, Cope… Lo que en vez de favorecer al partido, ha sido toda una lacra de imagen.
Por tanto, tras confirmar la renovación de Vallès respecto a su puesto en el gabinete de comunicaión de Moncloa, la primera consigna que se ha transmitido desde el Gobierno ha sido, aunque todavía de manera informal, ‘engrasar’ la relación con las principales cabeceras, cadenas, emisoras y digitales.
Es decir, Francesc Vallès, el hombre de confianza de Óscar López, tendrá que reestructurar su estrategia de cara a la relación de Moncloa con los medios. Y es que, el Gobierno parece tener claro que se enfrenta a una legislatura complicada y ser consciente de lo poco que ha servido el interés y esfuerzo por silenciar a las líneas editoriales que se distancian de sus objetivos, por lo que apuesta por evitar polémicas innecesarias frutos de una mala comunicación.
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