Alberto Garzón ha renunciado a incorporarse a ACENTO, la consultora de Asuntos Públicos de Alfonso Alonso y José Blanco. Asumiría la Dirección de Prospectiva Geopolítica después de Semana Santa pero, tan pronto se conoció la noticia, las críticas han sido tan voraces, que se plantó. “Seguiré con mis otros planes profesionales y reorganizaré mi vida pensando en mi familia, a quien más le debo”, ha dicho.
Pero, en medio de las críticas, una voz destaca en su defensa: la del ministro de Transportes, Oscar Puente. “Hay que cobrar poco. Pedir perdón todo el día por ser político. Soportar insultos e intromisiones en la vida privada. Si eres de izquierdas, a más a más, padecer todo tipo de bulos y calumnias. Y después buscar trabajo en algo que no tenga la menor relación con lo que has hecho”, ha publicado en su cuenta de X.
El revuelo
“La decisión despertó un enorme revuelo en el ecosistema de izquierdas, incluyendo a las formaciones y los espacios políticos para las que he dedicado todas mis energías durante los últimos 12 años, esto es, Izquierda Unida, Unidas Podemos y Sumar”, dijo en un comunicado publicado en su cuenta de X.
“La impresión general, según me confirmaron diferentes dirigentes políticos, era que se trataba de una decisión que afectaría negativamente a las organizaciones del espacio político”, explicó en el extenso documento. Y tilda de incomprensión la reacción de quienes fueran sus compañeros de militancia.
“Ante esta incomprensión y antes de llegar a un punto en el que pueda hacer daño al espacio político por el que tanto he trabajado, anuncio con este mensaje que he renunciado a incorporarme a ACENTO tal y como tenía previsto. No quiero que mi decisión personal perjudique a mis antiguos compañeros y compañeras de militancia en su necesaria misión de lograr el mejor resultado posible en las futuras convocatorias electorales. Siempre he antepuesto el interés colectivo sobre el interés personal, y considero que debe seguir siendo así”, ha dicho textualmente.
La respuesta de ACENTO
Inmediatamente, la consultora se ha pronunciado en sus redes sociales: “La propuesta de Garzón respondía a nuestra apuesta por el talento, la experiencia, el conocimiento y la máxima transparencia. Respetamos su decisión y seguimos apostando por la maduración de nuestro sector, en el marco de nuestro sistema político”.
ACENTO explica que la propuesta de incorporar a Garzón iba en línea con la transparencia y la profesionalización de los asuntos públicos en España que los caracteriza, “tal y como sucede en el modelo anglosajón”.
La reflexión
Garzón ha aprovechado para hacer un llamado a la reflexión. “Pienso que la izquierda tiene que reflexionar sobre cómo trata a los hombres y las mujeres que dedican su tiempo, su energía, y su vida, en resumidas cuentas –lo más preciado que tenemos- a los proyectos colectivos”.
“Lo dije al abandonar la primera línea de la política, y lo pienso más si cabe un día como hoy: si algo he aprendido es que la política es una trituradora de personas. La izquierda en la que yo creo no debería reproducir esas prácticas que expulsan a más gente de la que integran”, ha dicho en su comunicado.
Y ha sido aún más tajante, considera que mientras más personas de izquierda haya en los espacios de influencia, mejor. “La izquierda en la que yo creo es menos prejuiciosa e inquisitorial, es más heterodoxa y humana y, sobre todo, tiene una concepción de Estado y de la política donde lo importante no es el lucimiento personal en términos de pureza izquierdista, sino tener más influencia en todos los espacios posibles. Vivimos tiempos difíciles, y probablemente vengan tiempos peores a causa de la crisis ecosocial, y considero un error encerrarnos en nosotros y nosotras mismas, porque ocupar espacios es más que importante que autorreivindicarnos”, concluye.
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