El descabalgamiento de Carlos Herrera en la carrera por la Presidencia de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha sido recibido con alegría contenida en la COPE. Y es que la candidatura de Herrera era, como informó este mismo medio, visto con resquemor por parte de diversos actores vinculados a la radio de la Conferencia Episcopal. La falta de avales necesarios llevó a que el camino de Herrera finalizase frente al ahora imputado Pedro Rocha.
Esa conclusión ha sido bien acogida en la COPE, donde fuentes internas apuntan que “es lo mejor que podía pasar”. La candidatura de Herrera presagiaba roces y conflictos dentro y fuera de la cadena, empezando por el equipo de Deportes liderado por Paco González y Manolo Lama y siguiendo con el entorno del Gobierno. Unos y otros, más algunos interesados de la propia emisora, estimaban que la pretensión de Herrera de compaginar el cargo en la RFEF con el matinal de COPE podía generar asperezas.
En los Deportes de COPE -especialmente, pero también en otras emisoras- no han faltado quienes se han preguntado qué actitud se iba a adoptar, por ejemplo, si Herrera se veía inmerso en informaciones críticas o polémicas y cómo se podría cubrir algo así, siendo al mismo tiempo juez y parte. Algunos apostaban por un choque de trenes si Herrera seguía en la batalla, ya que se daba casi por hecho un aumento de la presión al equipo deportivo de la cadena en su favor. Por suerte, y según señalan allí, la falta de avales ha evitado esa posible cuestión que hubiera podido generar una crisis de elevadas magnitudes.
Otro tanto con el entorno gubernamental, que no veía con buenos ojos a la figura de ambidestra de un comunicador crítico con el Ejecutivo a primera hora de la mañana y un presidente de la RFEF institucional en los actos. Una faceta que, además, Herrera parece haber intentado explotar en su breve campaña, ya que desde la Secretaría de Estado de Deportes se detectaron artículos de algún que otro colaborador ‘pelota’ vendiendo el argumento del desalojo del ‘sanchismo’ de la RFEF.
No obstante, y aunque no se exprese, se da por hecho que quienes más y mejor han respirado con el final de esta historia han sido los altos directivos de la cadena y su propietaria, la Conferencia Episcopal, que no tendrá que lidiar con esos futuribles. Aunque, visto cómo va el propio Rocha, cualquier cosa es posible. No obstante, los conocedores de la situación del fútbol se muestran cautos: “Javier Tebas no va a dejar que, tras haber podido cantar victoria sobre Luis Rubiales, entre al frente de la RFEF un ‘outsider’”.
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