La emisión de bonos convertibles para salvar la deuda de Prisa ha provocado novedades en el plano accionarial de la compañía. El último paso ha sido la entrada de un nuevo accionista, Adolfo Utor, dueño de Balèaria y propietario de una de las cien mayores fortunas de nuestro país, con un patrimonio superior a los 350 millones de euros.
La relación del empresario con la compañía no es reciente. Accionista veterano de la compañía ha aprovechado los últimos movimientos financieros de Prisa para ampliar su posición. Según ha hecho pública la Comisión Nacional del Mercado de Valores, el empresario ha adquirido nuevas participaciones que le convierten en dueño del 5,4% de la compañía.
Lo ha hecho con una inversión de 20 millones de euros que le convierten en uno de los accionistas de referencia de Prisa. Aunque, por el momento, se mantiene fuera del consejo de administración cuenta con un porcentaje de acciones mayor al que tienen nombres como Santander (4,1%) o International Media Group (3,5%).
Aún así, su porcentaje de acciones queda lejos de accionistas mayoritarios como Amber Capital, con el 29,9% de la compañía; Vivendi, con el 11,7% o la familia Polanco, con el 7,6%.
Empresario valenciano, cercano a Ximo Piug
Según recogen varias fuentes, la apuesta de Utor por Prisa se ciñe a una estrategia puramente patrimonial. Una estrategia que es sinónimo de éxito en el sector del transporte marítimo. La compañía que preside el accionista de Prisa es la compañía responsable de conectar Baleares y Canarias con la Península.
Pero no es el terreno empresarial el único en el que mantiene buenas conexiones. También lo logra en el político. Es conocida la buena sintonía de Utor con destacados políticos socialistas como Francina Armengol o Ximo Puig.
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