La salida del crítico de televisión de ‘El Periódico‘ ha sido más abrupta de lo que parecía. Y es que no sólo hay jubilación, sino también una derrota judicial para el medio que lo acogió. Lo que ha dado pie a que vuelen los cuchillos y le lleguen incluso a Mónica Planas.
Jubilación movida la de Ferrán Monegal, que se ha despedido de treinta años de servicio en ‘El Periódico’ con una rectificación a su medio… y una condena judicial al mismo. El diario barcelonés, despidió días atrás a su crítico con un artículo titulado “Ferrán Monegal se jubila de ‘El Periódico’, ocultando que, en realidad, la salida del periodista tenía que ver con una sentencia fallada a su favor que condenaba al medio por diversas cuestiones laborales.
Sin embargo, el propio Monegal remitió una rectificación en la que negaba haberse jubilado ante el cese de su columna en ‘El Periódico’. El periodista aclaraba que su salida era fruto de dicha condena al diario de Prensa Ibérica por “mantenerme durante tres décadas en situación de falso autónomo, por no asumir sus obligaciones como empresa y fallando también a favor de mi petición de declarar extinguida la relación laboral que judicialmente me ha sido reconocida desde 1 de mayo de 1993”. Y, junto a ello, la condena a la editora para abonar una indemnización cercana a los 150.000 euros.
En su derecho de rectificación, también afirmaba que se había presentado su salida de una “forma tramposa” y sin permitirle despedirse de los lectores tras más de treinta años de servicio.
No es la primera ocasión en que Monegal acaba una relación con una cabecera de forma movida y en los juzgados. Ya sucedió a principios de los 90, cuando fue aupado como director de ‘Claro’, que debía ser el primer periódico sensacionalista de España. Sin embargo, fue cesado del cargo apenas tres semanas después y el asunto terminó en los tribunales, que declararon nulo el despido. Por el camino hasta el cierre, que tuvo lugar poco después, le sustituyó en funciones Arsenio Escolar.
‘Claro’, que fue una ‘joint venture’ entre Axel Springer y Prensa Española, duró nada y menos, entre otras cosas porque, según quienes anduvieron por allí, Luis María Ansón -entonces todopoderoso director de ‘ABC’ y artífice de sus portadas- hizo todo lo posible por poner trabas a un proyecto que no le gustaba.
A palos en la prensa catalañan
La ‘no jubilación’ de Monegal ha servido también para que vuelen los cuchillos por los medios catalanes en el ámbito de la crítica televisiva. Mientras que Monegal ha concitado, en general, el elogio de sus pares -con algún silencio clamoroso, como el de ‘El orangután’, como le apodan ciertos compañeros suyos-, la salida del crítico ha puesto en ebullición el reducido predio al que se circunscribe su actividad.
Así, no han faltado ajustes de cuentas y hachazos que habrán sentado como una patada a los aludidos. Un ejemplo claro lo ponía el digital ‘Elnacional.cat‘, del antiguo director de ‘La Vanguardia’ José Antich, que aprovechaba para cargar contra Víctor Amela (del diario de los Godó), “devorado [por] el personaje anti-indepe burlón y con ínfulas” y tildado de “parodia”.
Pero tampoco se ha escapado viva Mònica Planas, habitual juez, jurado y verdugo de quienes se mueven contra sus intereses. El digital recordaba que “solo hizo una sección en ‘Está passant’ que era tan mala que la acabaron cancelando”.
Y es que el ‘feeling’ de los de Antich con Planas, que no destaca precisamente por su ‘finezza’ como crítica, no es nada bueno. Años atrás, ya le cayó un repaso al considerarla responsable del despido de ‘Torito’ como colaborador de TV-3: “Adora los programas que le pagan o que tienen periodistas de su diario, como el de Ricard Ustrell. Cuando tuvo sección fija en ‘Está passant’ fue tan floja que no ha vuelto”.
Palomitas y a disfrutar…