La falta de originalidad está pasando factura a Telecinco en los últimos tiempos. La inercia de la cadena no ayuda, pero las últimas propuestas que se han pergeñado desde Mediaset están muy lejos de funcionar entre los espectadores.
El último ejemplo de ello se ha visto este sábado con Dinastías. El estreno del programa -que recuerda mucho a Lazos de sangre– se ha traducido en fiasco. Con apenas un 6,9% de cuota de pantalla y 485.000 espectadores, la lógica invita a pensar que su travesía por Telecinco no será muy larga.
Cifras al margen, lo realmente llamativo es que la cadena de Mediaset apuesta por un formato tan similar a Lazos de sangre, que ha sido capaz de instalarse en la programación de TVE y que cuenta ya con un sello reconocible para la audiencia.
De ahí que muchos desde redes sociales como X (Twitter) cuestionasen la apuesta de Telecinco prácticamente desde que se anunció su puesta en marcha. Con Joaquín Prat al frente, quizá lo más llamativo sea que Dinastías y Lazos de sangre comparten productora.
Ambos espacios corren a cargo de Tesseo Producciones. Una cuestión que invita a pensar que Telecinco ha querido emular un formato de éxito de la competencia y que, por la idiosincrasia de la cadena, encaja en su programación. No obstante, parece que la audiencia no está por la labor de suscribir la última apuesta de Mediast.
La nostalgia de los años dorados
Hasta hace no demasiado tiempo Telecinco era la cadena líder de nuestro país. Afortunadamente para Antena 3, aquellos tiempos ya pasaron y hoy es la cadena de Atresmedia quien marca el ritmo de la televisión en nuestro país.
Una realidad a la que desde Mediaset han tenido que acostumbrarse, pero para la que no parecen encontrar remedio. Darle la vuelta a la tortilla actualmente resulta una quimera, pero las últimas decisiones del grupo invitan a pensar que su estrategia para intentar acercarse a su rival es echar la vista atrás.
De ahí que durante estos últimos meses hayan anunciado la vuelta de formatos emblemáticos a Telecinco. Gran Hermano en su versión con concursantes anónimos, Hay una cosa que te quiero decir o Caiga quien caiga son sólo algunos ejemplos de esa nostalgia por aquellos años dorados donde Telecinco bebía las mieles del éxito.
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