La tragedia de Valencia ha provocado un flujo de información incesante. Horas de directos, programas especiales y debates; pero también oleadas de desinformación. Los bulos corren sin frenos estos días por las redes sociales, que son un altavoz para los desinformadores.
La rapidez con la que circula la información dificulta las labores de verificación y comprobación que deben hacer los periodistas. Es por ello que muchos programas de televisión se han dejado llevar por la confusión, buscando transmitir la última hora sobre la cifra de fallecidos a toda costa y sin acudir a las fuentes oficiales.
Esta semana se ha desmontado un bulo sobre la cantidad de muertos que, presuntamente, iban a encontrar los bomberos cuando accedieran al parking del centro comercial de Bonaire, en Aldaia. Todas las televisiones daban por hecho que podía haber cadáveres dentro, pero finalmente no se encontró ninguno.
Iker Jiménez, presentador de Horizonte y Cuarto Milenio en Mediaset, fue uno de los periodistas que más insistió en esta información. El periodista vasco dijo en redes sociales que “en el parking de Bonaire hay muchos cuerpos, muchos cuerpos. Muchos”.
Sin embargo, no fue el único en trasladar la posibilidad de que hubiera muertos en ese parking. laSexta Noticias, sin afirmar que hubiera muertos, señaló que el parking “se habría convertido en una auténtica trampa mortal”.
“Hemos preguntado a la UME sobre cuantos cadáveres puede haber en el interior y nos hablan de una cifra indeterminada”, señaló el reportero. Esta misma información se replicó en prácticamente todos los informativos de las diferentes cadenas de televisión. También Telemadrid, que trasladó a la audiencia que los bomberos “sí que han visto que hay víctimas”.
Un caos informativo del que casi nadie se libra. A pesar de las críticas que se han visto estos días a determinados programas, la desinformación supera todas las barreras y ningún espacio, cadena o grupo de comunicación está inmunizado contra las mentiras.
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