La decisión de Juan José Güemes de apoyar el fichaje de Begoña Gómez por parte del IE ya ha empezado a pasarle factura con su imputación. Y no se trata tan sólo de la cuestión jurídica, sino de la reputacional. Hasta ahora, el centro presidido por Diego del Alcázar había conseguido -no sin algo de plomo en las alas- capear la crisis generada por el paso de Gómez entre sus filas. Ahora, con Güemes, todo ha dado un giro absoluto.
Como ya apuntamos, en los últimos años Güemes había conseguido borrar sus pistas de forma discreta gracias al IE y a la familia Del Alcázar. El que fue, durante un tiempo, joven promesa del PP de Madrid, buscó refugió en el IE tras su salida de la política. Según fuentes populares, Güemes quería “desaparecer” después de haberse achicharrado como consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid. Y es que todavía se recuerda, por ejemplo, el polémico caso del trasplante de hígado, en un centro hospitalario madrileño, de su yerno, el inquietante Carlos Fabra.
La cuestión reputacional no sólo afecta al IE, con una crisis en la que Javier Ayuso -como ya advertimos también- va a tener que emplearse a fondo, sino que da de lleno a Güemes. Con un cambio, en esta ocasión: que está solo ante los medios conservadores que, en otros tiempos, le ampararon.
De hecho, hay un morbo especial en ver cómo los marginales restos de Intereconomía, agrupados en torno a El Toro TV, tratan la cuestión. Antiguos trabajadores de Julio Ariza, que recuerdan cómo Güemes era recibido a mesa y mantel en el extinto grupo del gorila moroso -al fin y al cabo, colocó a uno de sus hijos como jefe de gabinete del ahora imputado-, reconocen esperar ansiosos ver cómo aborda la cuestión.
La explicación es sencilla: en esta ocasión Güemes habría sido amparador de la mujer de Pedro Sánchez. Ni PP ni Vox (salvo, en este caso, que el pope Ariza le indique lo contrario a sus delegados en el partido) pueden permitirse lujos en este caso, que salpica directamente a La Moncloa. “Si Güemes tiene que caer, caerá. Le van a ‘fusilar’, en lo mediático y en lo político, porque el caso tiene hilo directo hasta la Presidencia del Gobierno”, valoran fuentes del sector de la comunicación. “Además, ya no es nadie en este PP”, argumentan otros conocedores del ambiente político.
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