Las ostomías, lejos de ser un signo de limitación, representan una solución médica que puede mejorar significativamente la calidad de vida de quienes las necesitan. Sin embargo, persisten numerosos mitos y prejuicios que dificultan la comprensión de su verdadero impacto. En este sentido y para informar de manera cercana sobre el funcionamiento y cuidados que requieren, el Hospital Universitario Infanta Elena –hospital público de la Comunidad de Madrid- celebró recientemente la “Jornada del Paciente Ostomizado”, en la que evidenció cómo el enfoque multidisciplinar, la tecnología avanzada y el acompañamiento emocional son claves para que los pacientes ostomizados puedan recuperar su autonomía y vivir plenamente.
El Dr. Carlos Esteban, residente del Servicio de Cirugía General y Digestiva del centro valdemoreño, afirma que “los principales desafíos en este ámbito son conseguir una buena irrigación del estoma, asegurándonos que presente una vascularización óptima, para evitar la necrosis del mismo, así como cerciorarse, mediante una buena disección, de que la longitud de intestino es suficiente, desde su anclaje al meso en la pared abdominal posterior, hasta su salida como estoma en la pared abdominal anterior”.
En cuanto a la labor de los profesionales, el Dr. Esteban remarca que su trabajo no solo se centra en realizar una cirugía exitosa, sino también en dotar al paciente de las herramientas necesarias para que puedan manejar su nueva realidad de forma autónoma y plena. En este sentido, “los cuidados abarcan desde garantizar la higiene adecuada del estoma y la piel periestomal para garantizar su adhesión al disco, hasta transmitir esos conocimientos al paciente y sus familiares, para que en el futuro sean ellos mismos los encargados de llevarlos a cabo”. Además, el especialista recalca la importancia de ofrecer un acompañamiento integral: “Un paciente ostomizado es especialmente vulnerable, ya que enfrenta un cambio físico importante que impacta también en lo emocional”.
Por otro lado, la Dra. Juliana Delgado Gómez, residente del Servicio de Urología del Infanta Elena, reconocen que aún existen mitos que dificultan la aceptación de las ostomías. “Es un error pensar que las ostomías son exclusivas de pacientes con cáncer, ya que en muchos casos, son la solución definitiva para tratar afecciones benignas, tanto en Cirugía General como en Urología, para solventar la patología de base del paciente”, dice, asegurando que “este tipo de intervenciones no solo salvan vidas, sino que también las transforman, devolviendo al paciente su capacidad de vivir plenamente”.
La importancia de un equipo multidisciplinar y los avances tecnológicos
La experta señala que el primer contacto de estos pacientes es el urólogo, independientemente de la patología por la cual se decida realizar. Este profesional es el que hace una aproximación inicial y le explica en detalle las implicaciones, riesgos, abordaje quirúrgico, entre otros aspectos, solucionando todas sus dudas para disminuir el miedo que puede producir este proceso. “Desde el primer contacto con el paciente, los equipos de Urología, Cirugía y Enfermería trabajan de manera coordinada para garantizar tanto el éxito de la intervención como la adaptación emocional del paciente y su familia”, apunta la Dra. Delgado, añadiendo que “este enfoque integral es esencial para minimizar el impacto psicológico y facilitar la transición a su nueva vida”.
La tecnología también desempeña un papel clave en la integración social y personal de los pacientes ostomizados. “Dispositivos como bolsas opacas y discos de alta adherencia han revolucionado el manejo de las ostomías -apunta el Dr. Esteban-; estos avances no solo mejoran la funcionalidad, sino que también eliminan barreras sociales al reducir las molestias visuales y olfativas asociadas al estoma”. “Todo ello hace que una persona ostomizada pueda tener una calidad de vida similar a una persona no portadora de estoma”, concluye.
Con iniciativas como esta jornada, el Hospital Universitario Infanta Elena reafirma su compromiso con una atención integral y multidisciplinar, que abarca desde la intervención quirúrgica hasta el acompañamiento emocional y social. Este enfoque permite a los pacientes ostomizados no solo aceptar su nueva realidad, sino convertirla en una oportunidad para redescubrirse y vivir plenamente.
Seguiremos Informando…