La Corporación Radio Televisión Española se encuentra sumergida en una pugna fiscal de un tamaño mayúsculo con la Agencia Tributaria. Dicha disputa amenaza con un “quebranto económico” superior a los 1.000 millones de euros, según El Mundo.
Auditores de la auditora EY han lanzado la voz de alarma, alertando sobre el grave impacto que una resolución desfavorable en los tribunales podría tener en las ya precarias finanzas de la empresa pública.
El reciente informe de cuentas desvela un panorama sombrío: un posible quebranto económico de 821,77 millones de euros, sumado a un impacto de 201,05 millones de euros en la tesorería del grupo por la “contingencia fiscal”. Esta cifra eclipsa las estimaciones de 907 millones de euros del ejercicio anterior, evidenciando la escalada de un conflicto que se antoja interminable.
La situación cobra un cariz paradójico, dado que la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), dependiente de Hacienda, es la accionista única de RTVE. A pesar de esta conexión, ambas entidades mantienen varias disputas fiscales.
Una de las batallas, y la que parece más favorable para RTVE, gira en torno a la repercusión del IVA por la compensación por servicio público. La Agencia Tributaria exigió el cobro de este impuesto a partir de 2018, mientras la corporación defendía su exención, un criterio que ha sido avalado en otros casos por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea.
La verdadera incertidumbre y el mayor impacto económico residen en cómo RTVE deduce el IVA que le es cobrado por sus proveedores y servicios comerciales. Esta cuestión ha generado una serie de inspecciones y procedimientos judiciales. Ya se han cerrado tres inspecciones abarcando periodos desde enero de 2015 hasta diciembre de 2022.
Además, el periodo de enero de 2023 a abril de 2024 fue objeto de inspección, culminando con un acta de disconformidad firmada por RTVE en febrero de 2025 y un acuerdo de liquidación en marzo. La situación se complica aún más con la apertura de nuevas actuaciones de comprobación sobre el IVA entre mayo de 2024 y febrero de 2025.
Un futuro incierto
Excepto las más recientes, todas estas actas se encuentran ahora en manos de los tribunales, distribuidas entre la Audiencia Nacional y el Tribunal Económico Administrativo Central (TEAC). El único fallo conocido hasta la fecha, por parte del TEAC, estimó parcialmente el recurso de RTVE, aunque la corporación ya ha recurrido esta sentencia a una instancia superior.
La posibilidad de una sentencia adversa representa un golpe devastador para RTVE. La compañía no solo carecería de los recursos necesarios para afrontar el impacto de Hacienda, sino que, además, ha contabilizado estas posibles devoluciones como un activo a cobrar superior a los 600 millones de euros, una práctica contable que ha sido objeto de críticas por parte del Partido Popular.
El panorama financiero de RTVE se ha oscurecido aún más en 2024. La corporación registró pérdidas de 12,83 millones de euros, casi el triple que el año anterior, lastrada por gastos financieros derivados de su deuda y un resultado de explotación negativo. A pesar de facturar 1.244 millones de euros, la mayor parte de sus ingresos (1.187,1 millones) provienen directamente de las arcas públicas, evidenciando su dependencia de la financiación estatal.
RTVE cerró el ejercicio con una deuda de 540 millones de euros, de los cuales aproximadamente 350 millones corresponden a entidades de crédito, un aumento del 42% con respecto al año anterior. Esto ha elevado su pasivo total a 784,1 millones de euros.
La batalla fiscal con Hacienda, que se cierne como una espada de Damocles sobre las cuentas de RTVE, subraya la delicada situación de la corporación y la urgente necesidad de una resolución que brinde estabilidad financiera a la radiotelevisión pública.
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