A pesar de que Extremadura es una plaza autonómica, al menos tres formaciones políticas la están interpretando en clave nacional por sus implicaciones políticas. Para empezar, el PSOE, cuyo candidato, Miguel Ángel Gallardo, ha ligado su suerte a las vicisitudes de los hermanos Sánchez. Pero, por el lado derecho del arco político, también aparece otro morbo: el del duelo en el OK Corral extremeño entre María Guardiola (PP) y Santiago Abascal (Vox).
Y es que el máximo dirigente de Vox se ha tomado la campaña extremeña y su resultado como un desafío personal. Las aguas bajan revueltas entre la candidata popular en Extremadura y el partido que inspiran los hombres de Julio Ariza desde que hace dos años las cosas explotaran en plena negociación -con Monasterio y Gabriel Ariza– y desde Vox tuviesen que poner orden prácticamente ‘manu militari’ con su gente.
Aquella negociación demostró la escasa sintonía, primero personal y luego política, entre ambos socios. La situación llevó incluso al cese del consultor Santiago Martínez Vares, ex dircom de Juan Ignacio Zoido desde sus tiempos en la Alcaldía de Sevilla, después de que se filtrase un audio suyo dirigido a un cargo de Vox, en el que ponía a escurrir a Abascal y a la cúpula de su partido. El episodio afloró la difícil negociación, en la que se recurrió a todo tipo de presiones y, según algunos, ‘juego sucio’. La deriva posterior del Gobierno de Guardiola y la actitud de algunos miembros de Vox, tras la orden de retirada de los Ejecutivos autonómicos compartidos con el PP terminó de sellar el mal rollo.
Una actitud que se prolonga hasta ahora. Efectivamente, tanto Abascal como sus asesores se han tomado Extremadura y Guardiola como asunto personal. Por parte de Vox, la comunicación ya ha comenzado con Abascal posando a caballo por la dehesa extremeña, recordando en cierta forma al video de las andaluzas de 2018 preparado por el vicesecretario de Comunicación, Manuel Mariscal Zabala. Se da por hecho que el líder de la formación -que sigue prefiriendo jugar con su baza antes que con la de su candidato autonómico, para no fomentar baronías regionales- contará con el apoyo de Tizona Comunicación (Kiko Méndez-Monasterio y Gabriel Ariza), así como del área respectiva de su partido, donde Álvaro Zancajo ha ido escalando posiciones como hombre de confianza del tándem de asesores externos.
Por parte de Guardiola, se apunta a una estrategia clásica a nivel autonómico, que contará con el apoyo de Génova, 13, donde son conscientes de que Vox va a por todas en Extremadura. Por el momento, se desconoce si la candidata popular ha optado por consejos externos, como en la anterior campaña electoral. Lo que sí queda a las claras es que si Guardiola se tropieza o cae o… el PP de Génova la amortizará a palos como ya ha hecho con muchos de los suyos. A Génova le sobra comunicación de la mala y empezar a hacer Comunicación de VERDAD…
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