El último EGM de 2025 ha dejado una importante sensación de desolación en COPE. El Estudio General de Medios ha traído los números rojos a una emisora que hace poco soñaba con amargar la existencia a la Cadena Ser. Algo que dejó escapar perdiendo una oportunidad que se ha esfumado.
En términos generales, COPE cuenta con 3.545.000 oyentes, 268.000 fieles menos que en la ola del pasado verano y prácticamente los mismos que el año pasado por estas fechas. Una caída masiva que se extiende al resto de programas troncales que sustentan su programación diaria.
Batacazo de Herrera en COPE
El primero, y más grande, es el de su programa estrella, Herrera en COPE. El espacio que tiene como estrella principal a Carlos Herrera se ha dejado 212.000 oyentes en el último EGM y cerca cien mil en el último año en su primer tramo. Una caída que afecta, no solo al llamado prime time, sino que se extiende en la franja posterior que comienza a las 10:00 horas y que ha perdido a 137.000 oyentes.
Un mensaje claro de la audiencia de COPE a los cambios que, poco a poco, ha introducido en sus mañanas. Pero no es el único formato que se ha resentido. El segundo programa informativo con más peso en la cadena también ha sufrido un importante varapalo. La Linterna, de Ángel Expósito ha caído hasta los 883.000 oyentes, perdiendo -respecto al último EGM- a uno de cada cinco fieles.
También se suman a este descenso de oyentes, formatos como La Tarde, de Pilar García Muñiz con 91.000 oyentes menos que este verano, y El Partidazo que, a pesar de contar con 15.000 oyentes menos, lidera su franja gracias a que la caída de su competidor ha sido mayor que la suya.
El empuje de los fines de semana
Solo Tiempo de Juego salva los muebles de la cadena liderando al completo el fin de semana, y Cristina López Schlichting en la mañana de los sábados -que no de los domingos- con Fin de semana. Unos números que ponen en jaque las últimas apuestas de COPE, que ha recibido los primeros resultados de la nueva temporada como un jarro de agua fría.
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