El agua es un elemento clave para el buen funcionamiento y desarrollo del cuerpo humano, ya que representa aproximadamente el 60% del peso corporal total. Varios estudios han revelado que el contenido de agua presente en los órganos se ubica en un 10%, mientras que un 83% se aloja en la sangre, también dos tercios se localiza en el compartimiento intracelular y un tercio en el compartimiento extracelular.
Los beneficios que aporta a una persona este recurso natural abarcan desde la regulación de la temperatura corporal, ayuda a eliminar los desechos metabólicos solubles, permite que se ejecuten diversas reacciones metabólicas hasta transportar por medio de la sangre nutrientes, hormonas y otros compuestos hacia el interiores de las células. Es por esto que los profesionales del sector de la salud recomiendan tomar una cierta cantidad de agua por día, con la finalidad de garantizar un óptimo funcionamiento del cuerpo.
La Comisión Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), ha informado que el consumo de agua dulce recomendado en personas de 14 años en adelante es el siguiente: 2,5 litros en el caso de los hombres y 2 litros para las mujeres. Según la encuesta Anibes, los españoles, a pesar de no presentar registros de deshidratación, no consumen la cantidad de agua básica, debido a que el 90% de los niños y el 75% de los adultos no se hidratan con el mínimo establecido.
Por su parte, una representante del Instituto Universitario de Investigaciones Biomédicas y Sanitarias (iUIBS), Mariela Nissensohn, ha asegurado que nuestro paísno cumple con “el requerimiento ideal para una población sana. En el caso de los adultos hombres, el 33 por ciento se queda por debajo de los 2,5 litros y en el caso de las mujeres, el 21 por ciento no consume los 2 litros indicados”.
La experta ha indicado que el agua no solo se obtiene a través de la bebida, sino también por las comidas. En promedio, a diario una persona debe ingerir este líquido a través de dos formas:
– Bebidas: Entre un 70 y 80%.
– Comidas (frutas y verduras en su mayoría): Entre un 30 y el 20%.
Nissensohn ha dado a conocer algunas de las consecuencias más comunes tras no beber suficiente agua durante el día:
– Estimula la falta de atención.
– Genera constantes dolores de cabeza.
– Disminuye la capacidad de conducir.
Ante un escenario de deshidratación, la portavoz del iUIBS ha sugerido aplicar los siguientes tips para así aumentar y mejorar los niveles de agua en el cuerpo:
– Beber los litros recomendados de agua según la edad y el sexo al que pertenezca la persona.
– Integrar frutas y verduras a las comidas del día.
– Hidratar el cuerpo entre horas y no solamente en los momentos de las comidas.
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