El País se prepara para uno de los momentos más decisivos de su historia. A lo largo de este mes, el diario implantará su muro de pago y comenzará a cobrar a los lectores de su edición digital con el objetivo de construir un negocio fuerte y sólido que no dependa del clickbait, las redes sociales y el SEO. Ante la inminente llegada de este nuevo modelo, Soledad Gallego-Díaz, directora del periódico, ha charlado con Montserrat Domínguez para analizar los principales retos a los que se enfrenta la publicación.
“Es el futuro, no hay otra manera de hacer periodismo. Es maravilloso porque, en papel, ¿qué podías tener? ¿Un millón de ejemplares en el mejor de los momentos? Pues en el digital puedes tener 85 millones”, apunta la responsable de El País, que recalca la importancia de innovar constantemente a la hora de explorar nuevas formas de contarle las cosas a los lectores: “Debemos utilizar los nuevos instrumentos, tontos seremos si no lo hacemos”.
“Además, la potencia que tiene la información en este momento es extraordinaria porque la puedes acompañar de imagen, de datos, de otros artículos… Es una riqueza tan grande que hay que suscribirse a ella, no puedes acceder a ella de otra forma”, añade Soledad Gallego-Díaz, que no desaprovecha la ocasión y pone en valor a la redacción de El País: “Este periódico tiene una cultura, que es algo que no se aprecia ni se valora suficientemente. Los periodistas de El País tienen una cultura que es el producto de 44 años de trabajo de centenares de periodistas que han ido aportando su conocimiento, su experiencia y su manera de hacer las cosas. Todo eso, al final, es una cultura periodística y profesional de altísimo nivel”.
Gallego-Díaz también ha escrito un artículo en El País desgranando las razones que han llevado al diario a adoptar este nuevo sistema: “El mundo digital, las nuevas tecnologías aplicadas a la información, han cambiado de arriba abajo las herramientas con las que trabajamos, el modelo de negocio de la empresa, la manera de relacionarnos con nuestros lectores, el ámbito, infinitamente más amplio, al que podemos llegar. Y tenemos que adaptarnos a esas nuevas realidades“.{wbamp-show start}
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En el texto, titulado ‘Hacer El País no es fácil’, la directora del diario remarca que estos cambios se enmarcan dentro de la necesidad que han desarrollado en los últimos tiempos los medios de comunicación de contar con todas las armas que tengan a su disposición para combatir contra las fake news y la desinformación: “En pocas semanas, lanzaremos el modelo de suscripción digital con el que estamos seguros de que podremos garantizar para las próximas décadas los niveles de periodismo de calidad que exige nuestro compromiso con ustedes. Un periodismo que sirva a la democracia y a la sociedad, que esté atento a ustedes, nuestros lectores, nuestro único, apasionado y verdadero objetivo”.
Así será el nuevo modelo de suscripción de El País
A diferencia de lo que sucede en otros diarios como El Español, eldiario.es o El Mundo, la publicación de Prisa ha optado por apostar por un muro de pago poroso, el mismo por el que se decantó The New York Times en su momento. De esta forma, los lectores de El País tendrán a su disposición la posibilidad de leer 10 artículos cada mes de manera gratuita y, una vez que superen el límite, deberán suscribirse para seguir accediendo a los contenidos del periódico. El precio fijado por la compañía es de 10 euros mensuales, lo que le sitúa como el medio español con la tarifa más cara, y no existe compromiso de permanencia. Por su parte, las personas que estén suscritas al rotativo en papel tendrán acceso ilimitado a la edición digital.
“Para garantizar que el proyecto pueda seguir creciendo en cobertura y profundidad, mantener una amplia oferta temática y especialización, y seguir contando con muchos de los mejores periodistas de habla hispana del mundo, el diario evolucionará hacia un modelo de suscripción digital, al tiempo que mantiene con toda su relevancia la edición impresa”, explica ‘El País’ a través de un artículo, en el que también señala que se trata de un “gran cambio que supone el inicio de un nuevo y emocionante camino, un paso imprescindible para sostener el mejor periodismo y seguir sirviendo a la sociedad”.
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