Durante la pandemia ha habido un crecimiento exponencial del juego y las apuestas online que también ha afectado a los adolescentes. Así, la Dirección General de Ordenación del Juego detectó un aumento del 57% de nuevos jugadores en las primeras semanas del confinamiento, sobre todo jóvenes, y eso a pesar de que los operadores del juego online exigen mayoría de edad.
Hoy, según el Ministerio de Sanidad, el 10,3% de los jóvenes entre 14 y 18 años realiza apuestas en Internet. Por ello, Orange y la Policía Nacional han lanzado una campaña de concienciación sobre los perjuicios que el juego online puede causar en los adolescentes y sus familias.
En la presentación de esta campaña han participado el director adjunto operativo de la Policía, José Ángel González; el comisario general de Seguridad Ciudadana, Juan Carlos Castro; la directora general de Regulación, Relaciones Institucionales, Comunicación Externa, Responsabilidad Social Corporativa y Fundación Orange España, Luz Usamentiaga; y el director general de la Unidad de Negocio Residencial de Orange España, Diego Martínez.
Por un uso LOVE de la tecnología
Las apuestas deportivas online se han convertido en el juego principal de los adolescentes, siendo sus ídolos deportivos la imagen de muchas de sus comunicaciones. Este hecho, unido a la capacidad adictiva del juego en internet debido a la sensación de riesgo provocada por el azar, su disponibilidad inmediata frente al juego presencial y al anonimato, está convirtiendo esta actividad en un serio problema en muchas familias.
Según datos de la Fundación de Ayuda a la Drogadicción (FAD), los jóvenes representan hoy el 50% de las personas que juegan online.
La nueva campaña de Orange y la Policía Nacional, que se enmarca en la iniciativa #PorUnUsoLovedelaTecnología, busca concienciar a los padres de los riesgos que supone el acceso a este tipo de actividad para sus hijos: adicción, aislamiento, ansiedad o agresividad son solo algunas de sus posibles consecuencias.
Las campañas en YouTube
Esta campaña de difusión y concienciación sobre esta problemática se articula en torno a dos vídeos: en uno de ellos se muestra una situación de ficción, que podría ser real, en la que la adicción al juego online irrumpe en la relación entre un padre un hijo.
En la otra pieza audiovisual, una experta de la Unidad Central de Participación Ciudadana de la Policía Nacional, responde a distintas preguntas asociadas a este problema.
Charlas en colegios e institutos
“La protección de los colectivos más vulnerables es un propósito que siempre ha guiado la actividad de la Policía Nacional”, ha dicho dl DAO de la Policía Nacional, José Ángel González.
En este sentido, el funcionario ha dado a conocer que, en 2019, año anterior a la pandemia, se impartieron más de 30.000 charlas en colegios e institutos, y que más de la mitad de ellas estuvieron dedicadas a los riesgos de Internet, tratándose, principalmente, problemáticas como el acoso escolar, las drogas, el sexting, el grooming y la violencia de género.
“A esta labor presencial de prevención y sensibilización, se suma la que se lleva a cabo desde el equipo de Redes Sociales de la Policía Nacional. Las redes son especialmente útiles en el objetivo de hacer llegar nuestros mensajes y, ante esa realidad, la Policía Nacional ha sabido transmitir sus mensajes con el código específico de cada red social, convirtiéndose en un referente mundial que cuenta con más de seis millones de seguidores”, ha añadido González.
“Para Orange, es un elemento esencial y estratégico ayudar a los usuarios -adultos, adolescentes y niños- a aprovechar las enormes posibilidades de la tecnología y lo digital como herramientas de aprendizaje, socialización. Por ello también es importante conocer los riesgos y proteger a los más vulnerables -nuestros hijos- frente a ellos”, explica Luz Usamentiaga, Directora General de Regulación, Relaciones Institucionales, Comunicación Externa, Responsabilidad Social Corporativa y Fundación Orange España.
Medidas básicas de prevención
1.- El diálogo es la mejor vía de prevención: hablar con nuestros hijos, explicarles de forma adecuada, y desde el respeto mutuo, lo que pueden encontrar en la red y sus peligros. De esta forma, se establece una relación de confianza que puede ayudar a detectar el riesgo de adicción.
2.- Enseñar a los jóvenes a gestionar su dinero y entender el valor de las cosas, así como promover su desconexión de la tecnología a través de actividades lúdicas o culturales.
3.- Enseñar a los jóvenes a asumir responsabilidades acordes con su edad para potenciar su madurez y potenciar su espíritu crítico para evitar conductas influenciadas por su entorno.
4.- Apoyarse en los contenidos educativos en el mismo entorno digital, que pueden ayudar a todos: adultos y menores, a reforzar esos mensajes sobre cómo hacer un buen uso de las pantallas (reparto adecuado del tiempo, marcar horarios de mutuo acuerdo, fomentar otras vías de entretenimiento, etc.).
Seguiremos comunicando…