Si ya de sí el trabajo de Comunicador requiere habitualmente de un temple especial, cuando el campo de actuación es el de la política la mayor virtud es conservar los nervios de acero. En este sentido, y con elecciones autonómicas y municipales en casi todo el país a la vuelta de la esquina, puede suceder que los responsables de Comunicación de los distintos partidos políticos y gobiernos locales pierdan la compostura y protagonicen alguna salida de tono. El Ayuntamiento de Rivas (Madrid), la Generalitat de Cataluña, Unió Mallorquina o el Partido Nacionalista Vasco han sido algunos de los ‘escenarios’ de los últos ‘Dircom Estrella’.
Casualidad o destino, el mes de marzo se ha erigido como los treinta y un días en los que varios Directores de Comunicación relacionados con la política han decidido saltar a la fama, en lugar de mantener su lugar detrás de las bambalinas. Ya sea disputas dialécticas con medios de Comunicación, autopromocionarse o como forma de desprestigiar al adversario político, han sido varios los casos en los que un responsable de Comunicación de un partido político o institución se ha visto envuelto la polémica.
Dentro de esta espiral de despropósitos, el prero en saltar a la escena mediática fue el incidente a tres bandas entre Ricardo RoyoVillanova, Director de Comunicación del Ayuntamiento de Rivas, Libertad Digital y El Partido Popular. El motivo: un post titulado ‘Aznar También es el Anticristo’ en el blog particular del Dircom en el que aseguraba que había que ‘entrullar y torturar’ a los dirigentes del Partido Popular, texto reproducido la cabecera digital de Federico Jénez Losantos, momento desde el cual comenzó una ciberdisputa entre ambos. RoyoVillanova, su parte, difundió una nota de prensa en la que dejaba patente que era un artículo en clave de humor que en ningún caso representaba la opinión del consistorio para el que trabaja.
Una semana después, la polémica se trasladaba al norte, concretamente al País Vasco. El jefe de prensa del PNV, Luis Aranberri Mendizabal, ‘Amatiño’, era vetado en Wikipedia intentar autopromocionarse. El actual jefe de prensa de Josu Jon Imaz, tiene una entrada en euskera y otra en francés en la enciclopedia virtual, si bien el problema surgió cuando una de sus empleadas intentó introducir una biografía del periodista en idioma español y Wikipedia detectó un intento de autopromoción lo que bloqueó la cuenta de Amatiño y borró el artículo.
Prácticamente al mismo tiempo que el anecdótico incidente de ‘Amantiño’, su homólogo de Unió Mallorquina, Antonio Martorell, telefoneaba a la cadena publica de las islas, IB3, para calificar de ‘sinvergüenzas’ a todo su equipo directivo. Al parecer, tan airada reacción se deba a un retaje emitido en el programa IB Confidencial producido EL MUNDO Televisión que mostraba la otra cara de algunas asociaciones de inmigrantes, cuyos dirigentes confesaron ante la cámara oculta que han montado la entidad con el único objetivo de cobrar subvenciones, entre ellos Jae Salom, líder de los inmigrantes del partido de Martorell.
Sin embargo, aún quedaba otro incidente estallar, probablemente el más grave de cuantos se han relatado hasta ahora: se trata de las amenazas proferidas Antonio Bolaño, Director de Comunicación de la Generalitat de Cataluña, al redactor jefe de La Vanguardia, Jordi Barbeta, a quien textualmente comentó ‘te juro que no voy a parar hasta joderte’. A pesar de las disculpas del presunto amenazador, quien afirma haber sido vícta de un calentón, el asunto ha trascendido incluso al Presidente Montilla, quien asegura que desde su gobierno ‘jamás se ha presionado a un periodista, ni se presionará’. Por su parte, el Colegio de Periodistas de la comunidad autónoma ha mostrado su rechazo a la actitud demostrada Bolaño.
Estos cuatro ejemplos ilustran a la perfección la dificultad de lidiar con un cargo a menudo demasiado expuesto a los medios de Comunicación. Además, aún falta semana y media para que concluya el mes…¿habrá alguna otra sorpresa?
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