El Ayuntamiento de Madrid instalará protectores en los cerca de 82 kilómetros de guardarraíles que tiene la ciudad, 78 de ellos en la M30. El alcalde anunciaba la medida para la seguridad de los motoristas.
El Ayuntamiento de Madrid instalará protectores en los cerca de 82 kilómetros de guardarraíles que tiene la ciudad, 78 de ellos en la M30. El alcalde, Alberto RuizGallardón, ha anunciado hoy esta medida, una vieja reivindicación de los motoristas ante las diferentes administraciones. “Para reducir al míno los posibles perjuicios a los motoristas estudiaremos los distintos sistemas disponibles para aplicar a cada caso el que sea más adecuado”, ha señalado.
Los guardarraíles son los responsables del 15% de las muertes en accidentes de moto en España. Con esta iniciativa, el Ayuntamiento de la Ciudad de Madrid se convierte en una administración pionera en la adopción de soluciones que incrementen la seguridad vial de los ciudadanos que se desplazan en moto. Ya se han instalado como experiencia piloto sistemas de absorción de pactos, que evitan la salida de los ocupantes de las motos bajo las barreras de seguridad, en los quitamiedos de aproxadamente un kilómetro de carretera a la salida del túnel de O´Donnell.
El sistema de protección integral de guardarraíles se plantará en cuatro fases. La prera en la M30, la segunda en los puentes de esta vía de circunvalación, la tercera en las carreteras de acceso a la capital y la cuarta en diferentes puntos del interior de la ciudad. “Con la decisión de extender los protectores a todos los guardarraíles, Madrid confirma, una vez más, su apuesta para que la moto sea un medio de transtes seguro y eficaz para moverse Madrid”, ha declarado RuizGallardón.
Este sistema está compuesto una malla o tejido elástico de hilos trenzados de alta resistencia al pacto que actúa en la parte exterior de la barrera. Con él, la severidad del golpe, en caso de accidente, se reduce en un 60%. Además, prociona una alta resistencia al pacto, absorbiendo gran cantidad de energía, y la fuerza del golpe se reduce paulatinamente debido a su elasticidad.
En Madrid el parque de motocicletas y ciclomotores supera los 150.000 vehículos y su demanda ha crecido de forma significativa en los últos doce meses. Según datos de la Dirección General de Tráfico, tan sólo durante el pasado mes de febrero se matricularon en toda la región 2.500 vehículos de dos ruedas, de los que la mayoría circularan las calles de la ciudad.
“En el Ayuntamiento estamos convencidos de que la moto constituye una opción de movilidad que se adapta perfectamente al modelo de ciudad que estamos promoviendo, pues permite el máxo aprovechamiento del espacio público y tiene un reducido pacto sobre el medio ambiente”, ha manifestado el alcalde.
Es este motivo que el Gobierno de la Ciudad ha puesto en marcha una serie de iniciativas para fomentar y facilitar su uso en la ciudad. Entre ellas la creación de una red de aparcamientos exclusivos para motos de los que actualmente existen 240, con un total de 2.300 plazas, y que antes del verano sumarán 300 con 3.000 plazas. Durante la próxa legislatura está previsto que el número de plazas de aparcamiento para motos alcancen las 12.000.
Las motos, además, están exentas del pago del Servicio de Estacionamiento Regulado en todo el interior de la M30 y pueden acceder a los barrios en los que se ha restringido el tráfico como Las Letras, Embajadores, Las Cortes, o la Puerta del Sol.
Otras de las medidas puestas en marcha el Ayuntamiento ha sido autorizar la circulación de las motos el carril reservado a autobuses y taxis y el últo tramo del carril BusVAO hasta Moncloa. “Con esta decisión cumplíamos el triple objetivo de obtener un mayor rendiento del viario público, potenciar el uso de las motos en el interior de la ciudad, así como ofrecer una mayor seguridad a los usuarios de este medio de transte, sobre todo en los 36 kilómetros en los que se ha instalado separador físico”, ha finalizado el alcalde.