Ha empezado el baile, y Espe lo ha abierto con paso decidido. El discurso de este lunes busca la creación, la apertura de la opinión pública del PP a un debate necesario, prescindible. Aguirre está en la carrera, pero sólo será candidata oficial si consigue los apoyos necesarios. Quedan dos meses: un abismo político.
Aguirre maneja bien los tiempos y los plazos, y el planteamiento de este lunes es el de una dirigente que no quiere cismas, que no es candidata desde este momento que sabe que esa es una batalla que sólo se puede dar si tienes la seguridad de que vas a ganar. Lo contrario sería una ruleta rusa de la que podría salir como el próxo cadáver político.
Esperanza, que sí sabe bailar el chachachá, que sabe ser prudente y medir los tiempos, hizo ayer el discurso de las grandes ocasiones, un discurso que es una buena pieza retórica, en el que hay una pasión, un proyecto, y un plazo, que son las tres condiciones que debe tener cualquier empeño vital. Fue un discurso para que el PP haga autocrítica, pero también para que recupere el orgullo.
ALFREDO URDACI, PERIODISTA