¿Tu coche tiene BAS? El Sistema de Ayuda a la Frenada era poco habitual hace sólo unos años, pero se está poniendo cada vez con más fuerza, debido a las evidencias que apuntan a la mejora de la seguridad que supone su inclusión: sólo en España, morirían 50 peatones o ciclistas y 136 ocupantes de vehículos menos cada año, lo que, además, significa un ahorro económico de alrededor de 258 millones de euros anuales.
Esta es la conclusión que ha presentado la Fundación Fitsa en su estudio ‘Evidencia Científica del Sistema de Ayuda a la Frenada (BAS)'. Pero el ahorro no se lita sólo a nuestro país: en toda Europa, podrían salvarse cada año hasta 1.100 peatones o ciclistas, lo que ha motivado que la Comisión Europea propusiese en octubre de 2007 incluir este sistema como equipamiento obligatorio de todos los vehículos nuevos en 2009.
El BAS funciona como ‘corrector' de uno de los errores más comunes del conductor: en situaciones de emergencia, tendemos a actuar sobre el pedal del freno con demasiada lentitud o con fuerza insuficiente; este dispositivo es capaz de detectar si el conductor ha iniciado una frenada de emergencia y ayudarle a finalizarla con la máxa eficacia.
Además, para evitar el bloqueo de las ruedas, el BAS trabaja de forma conjunta con el ABS, que pide que en una frenada brusca éstas se inmovilicen y el coche patine sin control. La combinación de los dos dispositivos mejora sensiblemente la seguridad de los peatones y ciclistas, así como del propio conductor y sus ocupantes, pidiendo la colisión o consiguiendo que ésta se produzca a menor velocidad.
Como decíamos al principio, estas evidencias están consiguiendo que el BAS comience a popularizarse poco a poco: si en el año 2007 uno de cada cinco vehículos no ofrecían este sistema ni de serie ni como opción, en la realidad el dispositivo estaba presente en el 72% de los vehículos matriculados. No es para menos, ya que según los datos de Fitsa, cada euro invertido en el BAS se pueden ahorrar 11 euros en costes económicos de accidentes de tráfico.