Las cajas están hartas del acoso mediático y político, me dice un directivo del sector de toda solvencia, no sólo que el sector financiero esté en el centro de la crisis, que se puede comprender. Los rumores de que hay seis cajas con problemas y que va a haber fusiones, a toque de cota, los consideran insinuaciones irresponsables.
Se han convertido en otra coartada del debate político. Reconocen que tienen problemas para financiarse, como los bancos, tienen que pagar el pasivo caríso, y hay un desfase en el ratio entre depósitos y créditos.
Al igual que la competencia, la banca, sufren un mercado internacional muy caro, "nadie quiere papel español". Van a tener una morosidad del 7º el 8% este año, no mucho más que la competencia.
Tienen morosidad en hipotecas, como los bancos, más del 3%, y la caída de la Bolsa les afecta, sobre todo las grandes participaciones industriales que tienen. No niegan los problemas, pero les parecería justo hablar de todo el sector financiero, con precisión, y no generalizar.
Las atacan no dar crédito, falso, dicen, están dando crédito enca de la media del sector financiero. La inversión crediticia crece más del 8% , lo que no dan es crédito a insolventes, ni van a refinanciar a los del ladrillo. "No vamos a aguantar a los inmobiliarios durante dos años, hasta que puedan empezar a devolver lo que deben", dice una fuente de una caja grande.
Más explicaciones sobre el crédito. "No hay demanda de crédito ni solvente ni insolvente, la economía se ha parado, y no regalamos dinero que nos va la supervivencia". Y en los aplazamientos de las hipotecas durante dos años a los parados, les gustaría que el ICO tome más riesgo, no sólo el 12%. Lo sienten el Gobierno, es lo que hay.
PD: A pesar de todo, dicen , los balances son solventes, y la clientela habitual trabaja normalmente. Si alguien no lo cree que vaya al Banco de España, "si hubiera una caja insolvente, dice mi fuente, el Banco de España, que tiene todos los números delante, la intervendría." Casualmente el Banco de España está reforzando la solvencia, obligando a las entidades a hacer más provisiones la morosidad creciente. Ni quito ni pongo, pero las cajas están un poco hartas.
Miguel Cifuentes, periodista