Cualquier trabajador de Unidad Editorial que leyera este titular de Antonio FernándezGaliano respiraría confiado sobre la situación económica de su empresa. Eso, si es que no conociera de verdad los serios problemas financieros que está teniendo el Grupo. Y es que la últa Junta de Accionistas celebrada esta semana los jerarcas de RCS junto con los directivos españoles ha sido color de rosas, según cuenta El Mundo. Una reunión en que no se ha hablado de las pérdidas, ni de los recortes de plantilla, ni de los 30 millones de recortes operativos.
El Grupo Unidad Editorial consiguió en 2008 consolidar su posición en el mercado, con unos resultados económicos a la cabeza de un sector como el de los medios de comunicación, golpeado duramente la crisis. El liderazgo de sus productos le ha permitido amortiguar esta difícil situación y mantener un margen operativo (Ebitda) positivo de 69,8 millones de euros y una rentabilidad sobre ingresos del 10,8%. Con este párrafo El Mundo encabeza la noticia sobre la Junta de Accionistas de su grupo editor.
Un optismo que es refrendado cada frase replicada de sus principales directivos. ‘Unidad Editorial es hoy el grupo mejor posicionado de cara al futuro', aseguró Antonio FernándezGaliano, consejero delegado, que también dijo que ‘la gravedad de la crisis económica no ha pedido que en 2008 Unidad Editorial completara con éxito y en tiempo récord la integración entre dos grupos'. Pedrojota remata esta sucesión de optismo exultante con una frase para el bronce: ‘Más de 35 millones de personas se informan a través de los medios de Unidad Editorial'.
Vamos partes. En el artículo de El Mundo no se habla de las pérdidas registradas durante el año 2008 equivalentes a 11,8 millones de euros, frente a los 20,8 millones de ganancia de 2007. Tampoco dice que los operativos de los que habla significan una reducción del 45% respecto de los datos de 2007 en que se lograron 127 millones de euros.
Al parecer en esta reunión tampoco se habló de los 30 millones de euros en recortes que ha pedido la empresa y que en un comienzo le obligaron a plantear un recorte de 400 puestos de trabajo y luego de 215 despidos forzosos. Tampoco se cuenta nada de los quince directivos ex Recoletos que debieron marcharse hace unas semanas y que precisamente la ‘exitosa' integración ha generado un lastre financiero difícil de superar.
Tampoco se ha dicho anda de las discrepancias de los italianos de RCS con Pedrojota Ramírez y Antonio FernándezGaliano, que les ha llevado a pedirles recortes urgentes para afrontar el año con garantías. En la nota de El Mundo sólo se habla de que Piergaetano Marchetti, presidente de RCS, respaldó el trabajo de los máxos responsables de la compañía y afirmó que ‘RCS demuestra que Unidad Editorial no es una filial de un grupo extranjero, sino una parte fundamental de un gran grupo internacional'.
Palabras de buena crianza que están lejos de la realidad que se vive dentro del grupo, donde muchos directivos italianos tienen serias dudas sobre la conveniencia y la viabilidad de la operación de compra de Recoletos.
Seguiremos Informando…
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