Es una realidad. La prensa se ha quejado amargamente en los últos meses que el Ejecutivo se niega a aprobar ayudas para el sector, a diferencia de la serie de apoyos que se ha dado a la televisión. Desde prnoticias ya os hemos contado la escasa viabilidad de estas propuestas, pero además existe una reticencia natural del Ejecutivo de apoyar a la prensa. Y es que ZP y su equipo no creen realmente en los diarios, ya que creen que esta coyuntura económica es una buena otunidad para un cambio de ciclo, en que Intet su verdadera pasión tome el relevo.
El equipo de Zapatero es consciente de que los diarios deben existir y que son un pilar para el empleo de periodistas, pero sin embargo, entienden también que la crisis económica está splemente ajustando el cambio de ciclo. Zapatero es un fanático de Intet y cree en el periodismo digital aunque con bemoles, además en su mente progresista circula la idea de que el futuro de los medios está en la Red y no en otro sote.
Al igual que muchos gurús de la prensa escrita confía en un cambio y que las empresas se reinventen para ofrecer nuevos servicios. Cree tanto, que con ayudas directas o con subvenciones, nada cambiaría y las cosas seguirían igual como hasta ahora, en que los editores han engordado para morir, con la remota idea de que serían salvados.
Respecto de la televisión y del supuesto trato a favor a este sote, el equipo de Zapatero considera que no se habla de mismo y que en el caso de las cadenas se han aprobado soluciones y un marco normativo que estaba pendiente desde comienzos de su prera legislatura. El caso de la publicidad de RTVE, la TDT pago y las fusiones entre teles eran temas viejos demandados el sector desde antes de la crisis, a diferencia de los diarios que piden ayudas directas y sólo para salvar sus cuentas de resultados, que hace un año eran brillantes.
Por todo, en Moncloa dicen que no abandonan a los diarios, pero que cualquier ayuda debe hacerse de momento, sólo desde el punto de vista del fomento a la lectura. Eso, sino aparece un looby realmente unificado de los diarios, en cuyo caso habría que planteárselo de nuevo. Y es que a día de hoy, los diarios están más preocupados de combatir entre ellos que en buscar soluciones conjuntas, a diferencia de UTECA que al menos algunos días logró unificar sus posturas.
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