La organización le pide al Gobierno, que reprocha al medio de comunicación su apoyo a las recientes manifestaciones de la comunidad nativa, que respete las normas administrativas de homologación de la emisora así como los plazos que él mismo fijó.
‘Nadie puede quedar engañado con las razones dadas el Gobierno para acallar La Voz de Bagua Grande. Esta decisión interviene tras recientes enfrentamientos entre las fuerzas del orden y las poblaciones nativas de la región Amazonas. Varias voces, tanto parte de la policía como del poder político, acusaron a la emisora de haber fomentado el motín. ¿Si esta acusación fuese fundada, entonces qué recurrir a argumentos de tipos administrativo y técnico para justificar la cancelación de la licencia de difusión de La Voz de Bagua Grande? Se trata de un acto de censura y de intidación. Instamos al Gobierno a cumplir su propia palabra y restaurar el derecho a emitir de la emisora’, declaró Reteros sin Fronteras.
Una resolución ministerial, con fecha del 8 de junio, revocó la licencia de difusión de La Voz de Bagua Grande. No obstante, la emisora gozaba desde el 13 de mazo de 2007, de una autorización de radiodifusión espacio de diez años. La resolución tomada en esa fecha preveía que La Voz de Bagua Grande dispusiese de un período de instalación y prueba de doce meses. El director de la emisora, Carlos Flores Borja, afirmó haberle remitido al ministerio, el 29 de enero, los documentos requeridos para la homologación. Dicho correo especificaba, con una carta del municipio de Utcubamba como prueba, que el sitio de instalación incial de la radio se tuvo que cambiar razones de seguridad. El ministerio retomó precisamente ese motivo, alegando una “opinión desfavorable” emitida el 31 de diciembre de 2008, antes de que acabase el período probatorio, para cancelar el permiso de radiodifusión.
En realidad, La Voz de Bagua Grande está en el punto de mira del Gobierno desde los enfrentamientos que agitaron la región Amazonas al principio del mes de junio. En medio de los disturbios, el 5 de junio, que causaron unos treinta muertos, el ministro del Interior, Mercedes Cabanillas, amenazó públicamente con cerrar La Voz de Bagua Grande y Radio Oriente, otra emisora ubicada en Yuraguas, su supuesto ‘apoyo’ a las violencias contra las fuerzas del orden. ‘El cierre de Radio Oriente después del de La Voz de Bagua Grande constituiría la prueba adicional de un grave perjuicio del Gobierno contra la libertad de prensa’, concluyó Reteros sin Fronteras.