Las niñas ya pueden pedirle a los Reyes Magos una “Barbie Esteban”. Suena muy español el término pero yo creo que la gashí ha quedado digna de la mejor caja de regalo solamente le falta el pompón. No le hacen falta pilas, si la tocas la nariz, abre la boca, y ahí, ya no son responsables los Reyes de lo que diga la moza. ¡Ojo, que puede suceder cualquier cosa! Por defecto, viene con dos o tres frases que dice si le das cuerda; a saber, ¿me entiendes?, ” mi Andreíta mato”, y “la Campa, ¿quién es esa señora?” A estas alturas, ya creo que no tendrá su bello rostro los daños colaterales que traen los quirófanos, y seguro que ya la puedes encargar. ¡Me lo pido! Además, luego venden vestiditos para que le pongas y le quites según el juego con el que vayas a jugar. Luego, si no tiene bastante la nena, cuando ya haya jugado con su Barbie, la veréis vosotros, padres, dando las campanadas de Vasile (Telecinco si te despistas). El día que dijo que debía ser ella, la más bella, se debió haber bebido toda la cosecha de la Ribera del Duero, que anda que no hay niñas monas y educaditas en la plaza. Esta Barbie viene sin pelos en la lengua, cierto.
La moza, como se siente guapa quiere quedarse en estado de su chico Fran, que no da tanta cancha como Jesulín pero que le ha tocado ser el esposo de. Quedarse encinta es una cosa que según José Luis y sus chicas ya no está de moda que con eso del “papis que me piro a abortar” ha pasado a ser un hecho histórico que tenía lugar en los albores del siglo XX.
Hay otra Barbie que se ha puesto de moda que sí tiene que ver con la LSSRIVE, dicho así parece como todas las leyes de José Luis, pero no hay quien la pronuncie, un dilorápidoquenomeentero…no es una muñeca, es una ley, la de salud sexual y reproductiva e interrupción voluntaria que tienen las Barbies que hemos fabricado entre todos los que deciden cuándo quedarse en estado, cuándo decir que no quieren al muñequito que traen en la barriga y cuándo y dónde quieren realizar el aborto. Tere, que es la fabricante de estas muñecas eso de que en Valencia se hacen los mejores juguetes, no es madre como muchas de las ministras y no saben lo que duele que una hija llegue al salón a una hora intempestiva tras haber hecho botellón y te diga, “estoy embarazada viejos”.
Recuerdo cuando nos reíamos de la campaña, “póntelo, pónselo”. Los chicos ahora, no solamente no tienen educación sexual, esa que pretenden partir en la ESO, sino que lo que saben, lo aprenden de forma atropellada, sin conexión y casi siempre carente de forma. “Me ha dicho un amigo que si abortas es que estás medioembarazada”. Mire usted, o se embaraza o no. El problema no es ese. La idea es trasladar a una mujer que tiene que tener una madurez y una responsabilidad suficiente para saber ejercer de madre. Ella debe saber cuándo va a suceder eso y debe ser que ella quiere. Nadie, ni el más guapo de sus novios, tipo Ken, el de la Barbie, decide, cómo, con qué y qué cosa es la que debe hacer para quitarse el muerto de enca, que llegados a este punto, parece que un embarazo es un marrón, (si hablamos en términos de los chicos).
Señores, miles de mujeres estarían encantadas de poder engendrar y no pueden. La ciencia ha facultado a la mujer de instrumentos para facilitarle el deseo de tener descendencia pero ya se encargan las que pían la libertad, de decirlas a las niñas que son libres si abortan. No hija Tere, la libertad la tiene una persona que decide con quién, dónde y cómo va a tener un hijo. No si Ken moja el churro en el chocolate, luego rompemos la taza y aquí no ha pasado nada.
La desinformación genera Barbies que solamente se quieren operar para parecer a Hannah Montana, otras quieren cantar para ser como Demi Lovato y muchas no comen y tienen problemas en el cole que no se parecen a nadie y no saben dónde ahorcarse. Ahora habrá algunas que se quieran operar como Belén Esteban y ya tenemos todo el pescado vendido que es lo que queríais. Madurar, madurarán seguro, como las peras cuando se caen del árbol y la vida pasará y llegarán a tener 20, 30, 40 o 50 y la naturaleza dirá basta, y no podrán elegir si quieren ser madres o no.
Eduquen ustedes a sus hijas, hablen con ellas de las majaderías que todos escuchamos y quíteles de la cabeza que deben recomponer su pecho, su nariz o su boca que entonces serán una Belén Esteban más y con una, tenemos bastante. Y no me meto contigo, ojo, antes de que saques las patas alto. Y para contrastes, hay otras mujeres que luchan una causa como lo hace Aminatu Haidar. No es la Esteban que también tuvo su causa, pero al paso que va la burra a lo peor no ve el año nuevo.
Juventud, divino tesoro, te vas para no volver, cuando quiero llorar, no lloro, y a veces lloro sin querer.
Nenas, ¿a ver quién escribió esto?. ¡Viva la LOGSE! Mundo de contradicciones.
Ana de Luis Otero
Periodista