Los ingresos de Google van, en unos 68%, destinados a los dueños de los tales adscritos al sistema AdSense. De esta forma, gran parte de sus ganancias son reinvertidas en la mejora de la plataforma.
Además el buscador indicó que AdSense es su mayor proveedor de ingresos con un 51% del total y que tiene planificado modificar ni sus tarifas ni sus cobros en el mediano plazo.
Estas declaraciones de la compañía se producen después de que el buscador fuera acusado de lucrarse gracias a los generadores de contenido, tanto a los grandes magnates de la prensa como a los pequeños blogueros.