Los dueños de los diarios dicen que sus caberas saldrán a la calle, aunque no aseguran su distribución ni que lleguen al lector. Mientras, los sindicatos luchan que no se pran y anticipan un tante seguiento en los turnos de mañana de los diarios. Lo cierto es que la mayoría de los periódicos sí verán la luz aunque con una tirada mína.
Hace pocos minutos CCOO y UGT han hecho una valoración positiva de la Huelga General en prensa, que se vivió un día antes con el objetivo precisamente de no sacar mañana periódicos a la calle. Los dos sindicatos mayoritarios han explicado que el seguiento ha sido tante en la prensa escrita y en las agencias de noticias, y que tuvo una incidencia ‘notable’ en el turno de mañana en periódicos como El País y Público, así como en los gratuitos Qué y ADN.
En el caso de El País CCOO y UGT dicen que la huelga tuvo un tante seguiento, tanto entre el personal de talleres como entre los miembros de la redacción. ‘A las doce del mediodía sólo se habían incorado a sus puestos de trabajo los jefes de sección y otros responsables del rotativo’. Algo silar ocurrió en el diario Público, donde hasta preras horas de la tarde sólo habían entrado a trabajar los responsables de la redacción. ‘El paro a esa misma hora era casi total en los gratuitos Qué y ADN, mientras que la incidencia de la huelga se dejó sentir también en otros medios de los grupos Vocento, Zeta y Unidad Editoria’.
UGT y CCOO, creen que la convocatoria de huelga en el sector de medios de comunicación tendrá su continuidad en los turnos de tarde y noche, y registrará un alto seguiento en las plantas de presión y en las empresas distribuidoras ¿Saldrán entonces los diarios mañana a la calle? Es posible preverlo, que todo depende del nivel de éxito que tenga la huelga en las prentas y en los canales de distribución, cuyo verdadero alcance sólo se conocerá esta madrugada.
Lo que si podemos es daros algunas pistas para entender la situación. En prer lugar hay que tener claro que el producto –el diario sí será elaborado a pesar de que ha existido un seguiento en las redacciones. Los redactores jefes sacarán el diario adelante, junto al resto de plantilla que no ha secundado la huelga. En el caso de ABC hemos podido saber que el seguiento ha sido escaso y en el resto de los medios –incluso en los que sólo fueron jefes de redacción hasta prera hora de la tarde apenas se ha notado la ausencia de redactores en las versiones digitales de los grandes periódicos.
No obstante, para ayudar a que el producto salga a la calle, la mayoría de los diarios están elaborando versiones reducidas. En el caso de los grandes sólo se realizará una edición para toda España, con la mitad de las páginas habituales y una tirada extremadamente reducida. Del mismo modo, en algunas cabeceras el cierre se ha decretado a las seis de la tarde, cuando habitualmente es a las diez, precisamente para facilitar su distribución.
Las direcciones de los diarios aseguran tanto que las cabeceras se prirán ¿Y la distribución? Eso es otra cosa. En El País y La Razón aseguran que el diario si saldrá a la calle, pero que no se comprometen a que llegue a las manos de los lectores que no responden la huelga que puedan realizar los distribuidores, empresas independientes y que prestan este servicio a los diarios externamente. No obstante, estas compañías muchas veces son familiares o empresarios autónomos que pueden temer que se les rescinda el contrato si no cumplen con llevar los diarios a los puntos de venta. Esto podría ser un punto en contra de la convocatoria de huelga.
Finalmente están los quiosqueros. El eslabón final de la producción de un diario. Las fuentes consultadas indican que en principio los quiosqueros abrirían ya que son autónomos y dueños de sus propios negocios. El problema es que en huelgas anteriores, algunos han cerrado miedo a piquetes y ataques de los movilizados el día de la manifestación.
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