A pesar de haber fracasado hace unos meses en la compra de Schering, Merck no se ha dado vencida y ha conseguido hacerse con el control del grupo suizo Serono, la mayor biotecnológica de Europa.
A pesar de haber fracasado hace unos meses en la compra de Schering, Merck no se ha dado vencida y ha conseguido hacerse con el control del grupo suizo Serono, la mayor biotecnológica de Europa.
“Esta adquisición supone una transformación del negocio de Productos Farmacéuticos de Merck y se traduce en una posición de liderazgo en el sector de los medicamentos biológicos que nos ayuda a afianzar su futuro a lo largo del siglo XXI,” afirma Michael Roemer, presidente de la junta directiva de Merck KGaA. “Las dos empresas tenemos una otunidad única de lograr una ventaja competitiva gracias a un presupuesto de I+D combinado de 1000 millones de euros y a una cartera de productos más sólida. Con 28 compuestos en desarrollo, ambas encajan perfectamente. Con la dirección y los empleados de Serono crearemos una empresa biofarmacéutica de prera clase con una presencia global, una fabricación de biotecnología de vanguardia y un fuerte creciento.”
Pero ese no fue el único moviento en la industria farmacéutica durante el día de ayer. El grupo químico y farmacéutico alemán Altana anunció que venderá su división de farmacia a la compañía danesa Nycomed 4.500 millones de euros (5.715 millones de dólares).