Con lo que un fumador medio gasta en tabaco podría ir de vacaciones cada verano. Cerca de 1.000 €, unos 230 cada 3 meses, 9 cartones o 90 paquetes. Visto de otra manera, lo que vale un año de vida ¿CÓMO? Con lo que cuesta toda esta nicotina se podría financiar el tratamiento de un año con Vareniclina.
Con lo que un fumador medio gasta en tabaco al año podría ir de vacaciones a una isla paradisíaca cada verano. Cerca de mil euros, unos 230 cada tres meses, lo que equivale a nueve cartones o 90 paquetes o, visto de otra manera, lo que vale un año más de vida ¿qué significa esto? Que con lo que cuesta todo este montón de nicotina se podría financiar el tratamiento de un año con Vareniclina.
Dejar de fumar puede prologar la vida hasta diez años y aumentar el bolsillo tanto de los consumidores como del Sistema Sanitario. El Estudio Análisis coste efectividad de Champix (vareniclina) en el tratamiento del tabaquismo en España, presentado en las XXVII Jornadas de Economía de la Salud (AES), sitúa la vareniclina como la terapia más eficiente si se tiene en cuenta tanto el coste del medicamento como el ahorro que supone, a largo plazo, evitar ingresos hospitalarios y otras enfermedades asociadas al tabaquismo.
Proyectando los datos que se establecen en este estudio, se concluye que la vareniclina consigue procionar un año de vida extra a un fumador sólo 230 euros (que es lo que cuesta el tratamiento completo), para un horizonte temal de unos 25 años, aproxadamente. Si un fumador decide dejar de fumar utilizando esta nueva terapia, disponible en nuestro país desde principios de año, el coste de cada año de vida que gane sería lo que costaran nueve cartones de tabaco, lo que se hubiera fumado en tres meses ¿vale la pena verdad?
Jae Fernández de Bobadilla, médico del departamento de Investigación de Resultados en Salud y Farmacoeconomía de la Unidad Médica de Pfizer, es uno de los autores del estudio, y destaca que es ‘fundamental tener en cuenta que la calidad de vida de una persona con tabaquismo empeora notablemente si no reciben tratamiento, sufriendo en algún momento otras enfermedades como EPOC, asma, cáncer de pulmón, enfermedad coronaria y cerebrovascular…’.
Estas enfermedades acaban pasando factura al Sistema Nacional de Salud, FACTURA, y nunca mejor dicho, que suponen millones de euros en términos de costes, puesto que ‘tienen que hacer frente a los tratamientos de las enfermedades derivadas del tabaquismo e, incluso, a los costes de hospitalización’.
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