Laboratorios Esteve celebró anoche en Madrid un seminario sobre trastornos del sueño dirigido a farmacéuticos y que fue partido Francisco Javier Segarra, coordinador de la Clínica del Sueño Estivill. Bajo el título ‘Insomnio: Causas y tratamientos' el curso quiso abordar las principales alteraciones del sueño así como sus causas y consecuencias y cuáles son las pautas a seguir para alcanzar una buena higiene del sueño. Si tienes problemas para conciliar el sueño, sigue leyendo…
Entre el 25 y el 30% de la población mundial padece anomalías relacionadas con el sueño y aunque en la mayor parte de los casos estos problemas son transitorios (20%), el 10% restante tiene trastornos del sueño de manera crónica. El perfil de la persona insomne está asociado a mujeres de edad media o avanzada pero la realidad es que nadie está libre de padecer estos problemas. Con todo, Francisco Javier Segarra, de la Clínica del Sueño Estivill, reconoce que la mayoría de las personas con problemas para conciliar el sueño no recibe tratamiento alguno.
‘Un error grave', admite Segarra, que afirma que la mayoría de los casos de insomnio leve o transitorio pueden resolverse acudiendo a la farmacia y siguiendo los consejos del farmacéutico ya que los boticarios son los profesionales sanitarios más cercanos a los pacientes y pueden ser los preros en solucionar problemas leves relacionados con los trastornos del sueño procionando un tratamiento farmacológico que no necesariamente deben ser fármacos de prescripción.
Además, no hay que tomarse a la ligera estos problemas relacionados con el sueño ya que, como afirma Segarra, ‘la falta de sueño acarrea otras molestias para nuestro organismo como pueden ser irritabilidad, depresión, cansancio o fatiga'. Y eso no es todo ya que el experto comenta que, aunque mucha gente lo desconozca, el insomnio puede ser consecuencia de otras patologías como el Síndrome de Apnea del Sueño, que es bastante prevalente entre la población y conlleva riesgo cardiovascular, el conocido como Síndrome de Piernas Inquietas o el Síndrome de Fase Retrasada, muchas veces mal diagnosticado como un trastorno de ansiedad que en realidad no es tal.
Para la persona que sufre trastornos del sueño no siempre es recomendable o necesario un tratamiento farmacológico ya que existen unas estrategias no farmacológicas que ayudan a las personas insomnes y que van desde técnicas cronobiológicas hasta técnicas cognitivoconductuales (control de estímulos, restricción de sueño), técnicas de relajación o educación en la higiene del sueño y prácticas de psicoterapia.
No obstante, siempre es mejor curarse en salud que tener que echar mano de algunas de las terapias citadas. Por eso, como medida de prevención, es conveniente adoptar unas pautas de ‘higiene del sueño' para que el periodo de descanso sea lo más confortable posible y que podrían ser algunas de las siguientes:
- Mantener horarios regulares de sueñovigilia
- Evitar comidas copiosas, alcohol y estulantes antes de acostarse
- Se recomienda una siesta de corta duración (unos 20 minutos)
- Realizar rutina regular antes de acostarse
- Realizar ejercicio físico durante la mañana
Finalmente, debemos recordar la principal función del sueño: ‘dormos para poder estar despiertos' y en este sentido, es preciso desterrar algunos falsos mitos sobre el sueño como la creencia de que las horas no dormidas se recuperan durmiendo más o aquella que dice que nos solemos quedar dormidos cansancio o aburriento cuando lo único cierto es que sólo dormos cuando tenemos sueño. Además, a pesar de la fama de dormilones que tenemos los españoles y pese a ser los inventores de la siesta, en comparación con nuestros vecinos europeos descansamos una hora menos que éstos y hacemos menos uso de nuestra más famosa costumbre.
