La campaña electoral previa a los comicios de Hefame, que tendrán lugar mañana, ha sido de todo menos aburrida. Y es que, al final las diferencias entre los candidatos han tenido acogida en los medios de comunicación.
Acta Sanitaria, publicación especializada dirigida nuestro compañero Carlos Nicolás, ha querido emitir su opinión sobre esta contienda electoral. Por el interés que nos ha suscitado la opinión de nuestro colega, reproducos su artículo publicado hoy.
PUNTO DE VISTA: HEFAME NO PUEDE ESTAR DIRIGIDA POR PERSONAS INTERPUESTAS
Madrid 16/09/2008. Mañana, y después de una campaña agitada quienes quieren hacerse con el poder sin dar la cara, está previsto que se celebren las elecciones al Consejo Rector de HEFAME (Hermandad Farmacéutica del Mediterráneo), una de las grandes distribuidoras farmacéuticas españolas y la principal empresa de la Región de Murcia.
En la actual convocatoria se presentan tres candidaturas que, en términos generales, pueden encuadrarse en los siguientes apartados: la encabezada el hasta ahora presidente de la cooperativa, Antonio Abril, ofrece una línea continuista y sus apoyos son conocidos, con nombres y apellidos; una segunda a cuyo frente se ha colocado a Sara Peñalver y que propugna una renovación más que discutible pues sus apoyos ni se atreven a dar la cara; y una tercera testonial, la liderada Valentín Martínez Torregrosa.
Lo que esconde Peñalver
En estos momentos puede decirse que de la prera, la de Abril, se conoce casi todo, mientras que de la segunda está todo descubrir, hasta el punto de que algunos de los candidatos que la integran apenas se surten de la cooperativa a la que quieren representar. Además, esta candidatura cuenta con un agravante, la inmoralidad con que actúan quienes dicen avalarla, pues no lo hacen públicamente, sino a escondidas, con pseudónos y anónos. Es más, son muchos quienes piensan que estos inmorales han colocado a Sara Peñalver para que dé la cara, mientras que ellos ocultan la suya, no sea que no salgan las cosas como ellos dicen que van a salir.
En este contexto resulta llamativo que, después de varios días manteniendo una página web supuestamente independiente en apoyo de Peñalver, ahora se descuelgan que la supuesta periodista que ofrecía la información y los comentarios, una tal Virginia, no existe. Es un engaño más de quienes dicen que van a decir la verdad si llegan a hacerse con el poder en Hefame. Me agino que será más de lo mismo, o peor. Es decir, la calaña moral de quienes apoyan la candidatura de Sara Peñalver deja tanto que desear que sería nefasto para la principal empresa de la Región de Murcia poner a su frente a quienes no dudan en servirse de estrategias fascistas para conseguirlo.
Cambio moral
Además, Sara Peñalver ha recurrido al g para ocultar la falta de moral de quienes, desde el anonato, han pretendido no dejar títere con cabeza. Me parece más lógica la actitud de Antonio Abril, que es lo que exaspera a quienes sólo van buscando bronca; que Abril sólo ha dicho lo que hay y debe consolidarse. A no ser que los amigos de Sara Peñalver, ocultos tras el disfraz del 'guerrero del antifaz', consideren que la renovación es volver al pasado del que vienen. Ya sabemos lo que dan de sí.
En los últos días, son muchos quienes me han preguntado en dónde radica el interés que suscitan las elecciones en Hefame; para mí está claro, se trata de la prera empresa de la Región de Murcia y hay personas que, aunque ahora estén agazapados, sólo quieren aparecer en la prera fila, para los que el segundo paso será deshacerse de Sara Peñalver, que lo visto es totalmente manipulable y sin ideas. Lo malo es que estos guerreros disfrazados son tan sinvergüenzas que no se atreven a dar la cara.
Carlos Nicolás. Director de ACTA SANITARIA