La tercera publicación auspiciada el Círculo de la Sanidad aborda la situación de las sanidades autonómicas con el fin de poner de manifiesto sus ventajas e inconvenientes. Nos referos a la obra ‘Sanidades autonómicas: ¿solución o problema?, que a través de un minucioso análisis llevado a cabo el Juan del Llano, director general de la Fundación Gaspar Casal, concluye que la descentralización de la sanidad autonomías arroja más luces que sombras.
En sus casi 300 páginas de extensión explica el autor de la obra el texto apunta lecciones aprendidas y señala sugerencias de mejora, reflejando el mapa de la salud pública de las diferentes regiones y haciendo una revisión de los pilares de coordinación del Sistema Nacional de Salud (SNS) con los servicios regionales de salud. Asismo, la obra también actualiza datos sobre utilización de servicios sanitarios en las Comunidades Autónomas y plantea una hoja de ruta y un decálogo de recomendaciones prácticas.
‘El principal problema de las sanidades autonómicas, advierte del Llano, se deriva de sus difícil cohesión, que genera o puede generar desigualdades'. Por eso, el experto aboga evitar que aparezcan estas desigualdades, abordando públicamente aquellos hallazgos diferenciales entre regiones que pudieran localizarse y esperando que los medios de comunicación social ayuden a trasladarlas al gran público.
A esto habría que sumar la especial situación desfavorable que atraviesa nuestra economía y a la que también se dedica atención en este libro sobre política sanitaria autonómica. De este modo, del Llano defiende que en estos tiempos de crisis económica se debería fomentar el empuje de las estrategias de cooperación entre comunidades autónomas y el Estado.
Con todo, dejando a parte problemas y soluciones que puedan mejorar los sistemas sanitarios autonómicos, lo que es una realidad, y así se muestra en el libro presentado el Círculo de Sanidad, es que la mejora de la calidad asistencial y de las instalaciones y equipamientos ha sido espectacular en las comunidades que tenían menor dotación sanitaria inicial como son Extremadura, Castilla y León, CastillaLa Mancha o Galicia y que cuando hablamos de gasto y de posibles desigualdades en oferta y demanda en los distintos servicios regionales de salud se observan tante diferencias en cuanto al gasto público sanitario, siendo Cataluña y la Comunidad de Madrid las que experentan los mayores aumentos.
En cuanto a médicos totales en activo en Atención Praria y en atención especializada, destaca la cifra en la franja noroeste, con tasas enca de la media, mientras que las comunidades autónomas más desfavorecidas son las insulares y la Comunidad Valenciana, según reza el informe. Asismo, el manual también apunta que los asturianos son los más satisfechos con el funcionamiento del SNS: las tasas de satisfacción aumentan en el Principado de Asturias, Aragón, Cataluña, Cantabria, la Comunidad de Madrid, las Islas Baleares y Andalucía, y tienden a disminuir en el resto, siempre en la comparación entre los años 2003 y 2007.
Otro de los temas clave del estudio ha sido analizar si el ciudadano percibe que recibe un servicio mejor al gestionar las comunidades autónomas la asistencia sanitaria en lugar del Estado. En este sentido, la media nacional disminuye entre el 2003 y el 2007: en comunidades como Cataluña la media empeora mientras que las poblaciones que tienden a estar más de acuerdo en que la situación de la sanidad ha mejorado son las del País Vasco y la Comunidad Foral de Navarra.
Como últo apunte cabe destacar que en prácticamente todas las comunidades autónomas el centaje de personas que piensan que éstas deberían ponerse de acuerdo entre ellas a la hora de ofrecer nuevos servicios a los ciudadanos sube y, finalmente, de las cifras que arroja el estudio se desprende que sólo los ciudadanos de Asturias, La Rioja, Andalucía y Canarias piensan que existe equidad en la dispensación de los servicios sanitarios con independencia de la comunidad de residencia.
Comentarios críticos de excepción
Esta obra cuenta con el valor añadido de incluir la colaboración de María Jesús Montero Cuadrado, consejera de Salud de la Junta de Andalucía, y de Francisco Javier Álvarez Guisasola, consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León, que han realizado sendos comentarios críticos al trabajo de base de Del Llano.
Para la consejera de Salud de la Junta de Andalucía, María Jesús Montero, ‘la autonomía no ha atado más que ventajas a la sanidad andaluza, contribuyendo también a aumentar espectacularmente el bienestar y la calidad de vida de los andaluces'. Además, en su opinión, ‘en España las diferencias en salud son muy pequeñas y no son achacables al proceso de descentralización'. Sin embargo, y a diferencia del autor, que se decanta directamente utilizar fórmulas de participación directa de los ciudadanos (copago), María Jesús Montero asegura que ‘con estas medidas se podría penalizar de forma injusta a pacientes crónicos y ancianos', lo que rechaza de pleno la medida.
En el otro lado, el consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Francisco Javier Álvarez Guisasola, acepta que la descentralización ha atado indudables ventajas, ‘pero en la medida en que no seamos capaces de dotarnos de un marco estable, donde todos respetemos las normas, donde no existan inequidades entre regiones o entre ciudadanos, la cohesión del sistema se perderá y se incrementarán las tensiones políticas, financieras y sanitarias, y todo ello conducirá a un futuro incierto del SNS ', afirma. Además, en sus comentarios, el consejero resalta las especiales características de Castilla y León: su extensión y la dispersión de su población, junto con el acusado envejeciento, determinan la necesidad de hacer un esfuerzo extraordinario para que todos los ciudadanos puedan acceder a las prestaciones sanitarias con independencia de su lugar de residencia.
En definitiva, prestando atención a las palabras de Juan Ignacio Trillo, presidente del Círculo de la Sanidad, ‘esta es una obra prescindible para conocer el futuro de la sanidad española, siendo indudable su vocación e intención de mejorar el sistema sanitario en un admirable ejercicio de reflexión y autoevaluación'.
