Actualmente, y según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 10% de los medicamentos que se comercializan en todo el mundo son falsificaciones. En nuestro país la cifra de este mercado de medicamentos falsificados ronda en torno al 1%. Se trata de un problema de salud pública que además es un fenómeno que va en aumento.
Para contribuir a parar esto fenómeno, el Colegio de Farmacéuticos de Barcelona, en colaboración con el Departamento de Salud de la Generalidad de Cataluña ha emprendido una campaña con la quiere sensibilizar a la población de la tancia de no adquirir fármacos a través de intet ni de otro canal fuera de los circuitos legales de distribución. Y es que, el riesgo no consiste solamente en consumir un producto terapéuticamente ineficaz sino que además se está consumiendo un fármaco potencialmnete tóxico y, tanto, peligroso para la salud.
Con esta iniciativa se pretende proteger la salud de la ciudadanía y evitar que llegue a consumir medicamentos falsos. Por ello, se ha puesto en funcionamiento un sistema de vigilancia e investigación que permite la detacción precoz de estos fármacos y que evite su entrada a los canales legales de dispensación.
Para la consecución de estos objetivos, la campaña prevé, un lado, sensibilizar a la población a través de la difusión de materiales informativos que estarán disponibles en las oficinas de farmacia catalanas (22.000 trípticos y 2.500 posters) que responden a preguntas como estas: ¿Cómo podemos sospechar que un medicamento es falso? o, ¿cómo podemos evitarlo?
Por otro lado, la campaña pretende dotar de unos protocolos de actuación y de decisión a los farmacéuticos (principalmente a aquellos que trabajan en el ámbito asistencial pero también a los farmacéuticos de la distribución y de la industria) para que luchen contra la falsificación de medicamentos.
Y todo ello para tratar de minizar los riesgos que supone la entrada de medicamentos falsos en el canal legal así como para potenciar la capacidad de los farmacéuticos para detectar la entrada eventual de algún medicamento falsificado durante la práctica diaria y saber cómo manejar esta situación de forma natural y acertadamente ante la situación de que se encuentre con alguna información o producto susceptible de ser una falsificación.
La principal vía de entrada de productos falsificados en los países desarrollados es a través de intet. La red ofrece a los falsificadores de medicamentos un acceso fácil a millones de consumidores potenciales y una amplio abanico de posibilidades de promoción y, sobre todo, a un coste irrisorio.
Las opciones más habituales que incitan a la compra de medicamentos susceptibles de ser falsificaciones son múltiples: desde correos electrónicos (spam) a banners o páginas web específicamente diseñadas para esta actividad. Además, a través de los buscadores tampoco es difícil acceder a un amplio abanico de páginas web donde se pueden adquirir todo tipo de medicamentos que vulneran las condiciones legales exigibles.
Hasta ahora no se han detectado medicamentos falsos en las oficinas de farmacia españolas lo que se corrobora que el canal farmacéutico es seguro. Hacer que esto continúe siendo así en el futuro es una tarea y una responsabilidad de todos.
¿Cuáles son los medicamentos que más se falsifican?
Al principio, los medicamentos que más se falsificaban en los países desarrollados pertenecíann al grupo de los denominados: ‘medicamentos relacionados con el estilo de vida’: medicamentos para tratar la disfunción eréctil, la obesidad, el tabaquismo, trastornos del sueño o anabolizantes hormonales pero según ha ido avanzado el mercado de los medicamentos falsificados se ha podido observar que con el tiempo se falsifican cada vez más medicamentos para el tratamiento de patologías que afectan seriamente a nuestra salud como antibióticos, antiagregantes plaquetarios, hipercolesterolemiantes, oncológicos, etc. Y es que la falsificación es una actividad que evoluciona en función de la demanda y la sensibilidad de la población. Tanto es así que en los últo tiempos ha crecido con fuerza la oferta de medicamentos antigripales.
Algunas cifras
El negocio de los medicamentos falsos se esta que produce unos beneficios de entre 30.000 y 40.000 millones de dólares anuales y se prevé que alcance a cerca de los 75.000 millones de dólares en el año 2010. Eso supondría un incremento de más del 90% desde el año 2005.
En 2006 se confiscaron en las aduanas europeas alrededor de tres millones de medicamentos falsificados. En 2007 esta cifra se situó enca de los 4 millones, lo que ya representa un incremento del 51% respecto al año anterior.
