En España hay más de 4 millones de Pacientes asmáticos, de los cuálés más de un millón son niños. Sin embargo la enfermedad continúa estando infradiagnosticada e infratratada. Existen datos que relacionan los alergenos, algunos virus, el tabaquismo, la contaminación y la dieta como factores que, acompañados una determinada carga genética hereditaria, pueden hacer que una persona desarrolle asma.
Este año, con motivo del Día Mundial de la Alergia, la Organización Mundial de la Alergia (World Allergy Organization WAO) ha querido centrarse en la problemática del asma infantil y alertar sobre la necesidad abordar y tratar el asma infantil de forma precoz.
El asma es la enfermedad del aparato respiratorio más común en la población infantil. Aunque puede aparecer a cualquier edad es más frecuente en los preros cinco años de vida comenzando el 25 ciento de los casos durante el prero. Mientras que algunos niños asmáticos mejoran sus síntomas con la edad, otros empeoran y puede incluso que los síntomas desaparezcan con el comienzo de la adolescencia, para aparecer más tarde en la vida adulta.
Existen factores de riesgo que aumentan la posibilidad de padecer esta patología, como una historia familiar de alergia; padecer dermatitis atópica, alergia a alentos, rinitis o conjuntivitis alérgica; infecciones virales repetidas durante la prera infancia y exposición pasiva al humo del tabaco, principalmente cuando la madre es la fumadora.
Otro tipo de alergias sobre las que se han centrado las sociedades médicas han sido las alergias a medicamentos. Esta reacción alérgica se produce el uso no necesario de fármacos o el abuso en su ingesta, hecho que se da con mucha frecuencia, sobre todo en el tratamiento de enfermedades respiratorias. Un 15% de la población española puede sufrir alguna reacción adversa a fármacos, aunque sólo en un 7% de los casos se confirma que es realmente una alergia. En general, las reacciones adversas a los medicamentos son comunes y casi cualquier medicamento puede causarlas.
En el caso de la población infantil, uno de cada diez niños hospitalizados pueden sufrir una reacción adversa a los fármacos, además de ser la causa del 2% de las hospitalizaciones pediátricas. Y se calcula que entre el 3 y el 6 ciento de los ingresos hospitalarios en Europa se deben a reacciones adversas a fármacos.
