Nos ha costado, pero lo hemos conseguido. Parece que para el Gabinete de prensa del Ministerio de Sanidad, si no eres de El País o El Mundo, perteneces a otro nivel de periodistas. Tras varios meses detrás de la entrevista al nuevo Secretario General del Plan Nacional sobre Sida, Tomás Hernández, prsalud consigue hablar con él y conocer cómo desde el Ministerio se están abordando las políticas de prevención y lucha contra el VIH en nuestro país.
Tomás Hernández responde a las ONG´s Madrileñas que se quedan sin ayudas para la lucha contra el VIH. En una entrevista a prsalud, el nuevo Secretario General del Plan Nacional sobre Sida no ha querido entrar en polémica con la Comunidad de Madrid sobre la retirada de las ayudas y subvenciones a las Asociaciones y ONG´s de la comunidad dedicadas a la lucha y prevención del VIH/Sida. ‘Estamos al tanto de la problemática, pero es la Comunidad de Madrid la que tiene la competencia‘.
Se ha incrementado el número de nuevos diagnósticos de VIH en hombres que tienen relaciones sexuales con otros hombres, ¿cómo afrontan desde el ministerio esta situación?
Hay que hacer una puntualización, y es que no tenemos datos de todas las comunidades autónomas, lo que lo único que podemos hacer es una estación. Sin embargo, parece que hay una tendencia al aumento de este grupo. Pero con los datos que tenemos, podemos decir, que una parte fundamental donde nos debemos centrar, es trabajar con las organizaciones no gubernamentales y asociaciones del colectivo de homosexuales, lesbianas y bisexsuales. Colaboramos con ellos para saber el tipo de campañas que debemos hacer. Nuestra intervención, además, debe estar coordinada con las acciones de las organizaciones internacionales.
Se ha registrado una estabilización de la infección desde el año 2004 ¿Podemos estar en un punto de inflexión, donde la cifra de nuevas transmisiones es muy difícil que se reduzca?
No. No creo que hayamos llegado a una meseta que no podemos cambiar. Yo creo que con el esfuerzo de todos, sobre todo coordinándonos todos bien, podemos seguir reduciendo las cifras actuales.
Casi el 40 ciento de los nuevos diagnósticos de infección VIH se realizó en personas originarias de otros países. ¿Cómo está afectando el fenómeno de la inmigración en los planes de prevención?
Es verdad que, centualmente, cada vez hay más personas extranjeras infectadas, pero esto no está suponiendo un aumento de los casos de sida o de infecciones de VIH. Este cambio va en sintonía con el cambio demográfico que se está produciendo en nuestro país. Aún así, hay una serie de actuaciones específicas que queremos desarrollar; colaborando con el colectivo de inmigrantes, y sobre todo con las Comunidades Autónomas. Para este año tenemos pensado llevar a cabo una campaña específica dirigida a este colectivo. Todavía la estamos diseñando, identificando cuáles son las necesidades de estas personas.
Casi un tercio de los nuevos casos diagnosticados presentaba una inmunosupresión acentuada en el momento del diagnóstico, muchas voces apuntan a que la extensión de la prueba del VIH a otros medios, como ejemplo, las farmacias, puede ser una solución para detectar las nuevas infecciones con más rapidez. ¿Llegará la prueba del VIH a las farmacias?
Eso es un reto que tenemos. Llevamos ya mucho tiempo trabajando en ello. Hay un retraso alto en el diagnóstico, como en otros países de nuestro entorno. Hay un centaje de las personas diagnosticadas en las que el diagnóstico se le hace ya tarde; cuando tienen una situación inmunológica más o menos comprometida. Hay varias intervenciones para acabar con esta situación que han demostrado buenos resultados. Una es ampliar los lugares donde una persona puede hacerse la prueba del VIH. Tradicionalmente se hacía en centros sanitarios, pero ahora, en varias comunidades autónomas estamos comenzando a realizar las pruebas en farmacias o en organizaciones no gubernamentales. También hay un trabajo que estamos haciendo con las sociedades científicas y de médicos, para concienciarles sobre la tancia del pronto diagnóstico. Por el momento han sido Cataluña y País Vasco las dos comunidades en las que se ha llevado la iniciativa, y según los resultados, valoraremos la viabilidad de plantar la prueba del VIH en todas las farmacias.
A pesar de las campañas de concienciación y la labor de muchas asociaciones, las personas con VIH/sida siguen muy estigmatizadas, y son pocos los que se atreven a declarar su condición. ¿Qué proyectos están llevando a cabo desde la secretaría para cambiar esta situación?
Es cierto. Es una de nuestras prioridades. La campaña del día Mundial del Sida, ejemplo, se centró en este aspecto. Pero también estamos trabajando con trabajadores y sindicatos para que las personas con VIH puedan acceder al mercado laboral. Yo creo que hay varias formas de intervenir, como trabajar en la prevención positiva.
La dotación presupuestaria en materia de planes de prevención del VIH/Sida ha ido disminuyendo en los últos años ¿Ya no es el VIH una amenaza para las autoridades sanitarias?
No estoy de acuerdo. En los últos años ha habido un aumento, a excepción del año 2009. Yo creo que todas las personas que trabajamos en esto no podemos relajarnos, quizás ese sea la única disminución.
En 2009 el Ministerio de Sanidad destinó más de 600.000 euros en campañas de prevención del VIH, para este año, la cifra no supera el medio millón ¿las campañas no son eficaces o el ministerio tiene otras preferencias a la hora de asignar el dinero en campañas?
No todas las acciones de prevención se llevan a cabo con campañas, hay otras fórmulas. Para el próxo año hemos planificado y programado las campañas que hemos considerado convenientes. Las otras opciones son destinar dinero para la financiación de organizaciones no gubernamentales. Las campañas tienen su papel y su tancia, pero no son el aspecto más tante.
Su llegada a la secretaría del plan nacional sobre sida se hizo en el más puro secretismo, de hecho, las principales organizaciones de lucha contra el sida se quejaron de haberse enterado la prensa de la marcha de su predecesora ¿Cuáles fueron los motivos que pulsaron este cambio?
Yo no estaba al tanto de lo que estaba ocurriendo. El cambio fue bastante rápido. También hay que señalar que como un cargo público y de libre asignación, son los responsables de la administración los que deciden cuando se pone a una persona, y cuando se la quita.
¿Cuál es su relación con las asociaciones y ONG´s dedicadas a la prevención del VIH/Sida?
Yo creo que hay una relación bastante fluida.
Asociaciones y ONG´s madrileñas han visto cómo la Comunidad de Madrid ha elinado las ayudas y subvenciones a muchas de estas. ¿Piensa tomar cartas en el asunto?
El Ministerio de Sanidad tiene unas competencias concretas, y según esas competencias tomaremos las medidas otunas. Yo como secretario me he puesto en contacto con las asociaciones y con la responsable de la asignación de recursos de la Comunidad de Madrid. Por nuestra parte estamos al tanto de la problemática, pero es la Comunidad de Madrid la que tiene la competencia. En mi opinión, la participación y colaboración de la sociedad civil es una pieza fundamental en la prevención de la epidemia.
Los agentes sociales son clave, pero ¿y si no tienen dotaciones económicas para sustentarse?
Eso es cierto. Todos necesitamos recursos humanos y financieros para llevar a cabo nuestro trabajo.
¿Por qué aceptó el cargo?
Me parece que la epidemia del VIH es un campo apasionante. Me pareció una otunidad para poner en marcha mi entusiasmo y la experiencia que traía trabajando en este campo.