Cuando hace unos meses LinkedIn abrió su oficina en España y puso como perfiles de referencia los del Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el mío, lo prero que pensé fue: “gracias Carolina”. Estamos hablando de la red social profesional más tante que hay en el mundo, con 150 millones de usuarios (tres de ellos en España).
Pensé “gracias Carolina” que fue ella la que se encargó de elaborar mi perfil. Y gracias a mi aparición en el vídeo promocional de LinkedIn, mi visibilidad ha aumentado de forma considerable. Así que me encontré con la obligación de invitar a comer a Carolina Rojas (http://es.linkedin.com/in/carolrojas). ¡Qué menos! Bueno, en la obligación y el placer.
Durante la comida, como no podía ser de otra forma, hablamos de LinkedIn y de lo que puede hacer las personas. Ella me recordó que la mayoría de los responsables de recursos humanos van a esta red para encontrar candidatos a diferentes puestos.
Es la manera más acertada de hacer networking; es decir, de conocer a gente que puede interesarnos cuestiones profesionales o, splemente, sociales. Me decía que si no estás en LinkedIn es como no ir a la fiesta. Y si no vas a la fiesta no vas a poder entrar en la zona VIP.
Los perfiles que hace Carolina Rojas, para profesionales de todos los sectores tienen la gran virtud de destacar. Le he enviado a varios clientes y han quedado encantados. Me decía ella que “es como vestirte. Si te vistes bien deslumbras. Si lo haces mal o de forma descuidada destacarás negativamente. Al relucir sobre los demás, tu propuesta transmite valor. En diez segundos o un párrafo consigues captar la atención. De eso se trata”.
La cruda realidad es que los que no están en LinkedIn están fuera del mercado. Y los profesionales “no podemos permitirnos estar fuera del mercado”.
Y para ello es prescindible que “apetezca leer tu perfil.”. “Es como cuando vas a una fiesta a ligar, lo intentas con la más guapa, la que más destaca, la que intuyes en unos segundos que te puede interesar”.
Carolina Rojas, que comunica con pacto, insistió en que “una vez que estás en LinkedIn, es inevitable que te observen, y que te comparen. Como cuando te sientas en una terraza en verano, a las que la gente acude pare mirar y ser visto”.
Así que, al final, LinkedIn es una plataforma online para expresarnos, conectar y ser elegidos, respondiendo a las mismas necesidades que nos han movido siempre. La competencia es dura.
¿Qué vas a hacer tú para destacar en LinkedIn?
@JuanmaRomeroTV