El Periódico de Catalunya (Zeta) ha presentado hoy el ERE de extinción de su prenta de Parets en Barcelona que significaría el despido de 102 personas. La empresa ha presentado además un Plan Social para mantener 47 despidos y bajar a la mitad los salarios de los que se queden. La representación de los trabajadores ha convocado tres días de huelga a partir de mañana. El objetivo es que no salga el diario, pero Zeta ya ha preparado un plan de contingencia para prir en tres plantas: Zaragoza, Manresa y Tarragona.
MANIFESTACIÓN DE LA PLANTILLA DE LA IMPRENTA REALIZADA LA TARDE DE AYER EN BARCELONA
El ERE extinción se ha presentado con las condiciones ya anunciadas. Es decir el cierre total de la empresa con 102 despidos, aunque ofreciendo un Plan Social con 47 salidas, pero con reducción de salarios del 50% para la plantilla que se quede en la prenta de Parets. La representación de los trabajadores ha rechazado completamente esta decisión y han anunciado un calendario de movilizaciones que incluyen la convocatoria de tres días de huelga en la planta: el miércoles, jueves y vies.
¿Saldrá el diario el jueves? La intención de los sindicatos es que no, pero ya advierten de un dispositivo de emergencia que está preparando el Grupo Zeta y que incluye la presión de toda la producción en tres plantas alternativas: Zaragoza donde se pre El Heraldo, en Manresa donde se pre El Mundo y en Tarragona. Fuentes de los trabajadores han confirmado a prnoticias que durante estos días la empresa ha estado trasladando papel y personal a estos sitios para sortear la huelga. En Parets además de El Periódico y St se pren las ediciones de ABC y la Razón para Cataluña y Levante y algunas revistas a terceros.
Según han comentado fuentes del Comité a prnoticias esta convocatoria de huelga se sumará a una huelga de firmas en la redacción del diario el jueves y vies de la semana que viene. Además se someterá a Asamblea General la convocatoria de seis días de huelga en todas las empresas del diario, que afectaría a un total de 500 personas. Ahora queda un mes para negociar, aunque desde los sindicatos creen que es inviable que El Periódico deje de tener una planta de presión: ‘perderíamos independencia y calidad’, indican.
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