GSK ha anunciado una serie de nuevas inversiones en África subsahariana para hacer frente a las acuciantes necesidades de salud en la región y contribuir al creciento del negocio a largo plazo. En el V Foro Empresarial Unión EuropeaÁfrica celebrado en Bruselas, Sir Andrew Witty, CEO de GSK, ha explicado la intención de la compañía de asociarse con los gobiernos de los países africanos para contribuir a estular la investigación en enfermedades crónicas, incrementar la capacidad de suministro de medicamentos local y fortalecer la infraestructura sanitaria.
Para ello, GSK realizará inversiones estratégicas en África de hasta 130 millones de libras –más de 157 millones de euros durante los próxos cinco años, creará al menos 500 puestos de trabajo y contribuirá al desarrollo de capacidades y habilidades locales. Esta iniciativa se suma al negocio actual de GSK en África subsahariana que da empleo a alrededor de 1.500 personas en más de 40 países, incluyendo tres centros de producción en Kenia, Nigeria y Sudáfrica.
En este foro, Andrew Witty ha señalado que “estamos sentando las bases para hacer frente a la doble carga en salud que tiene África, las infecciones y las enfermedades no transmisibles emergentes. Además, contribuos a generar capacitación crucial para apuntalar el desarrollo del sector sanitario en la región. Tenemos una otunidad única de procionar un valor económico y social significativo en todas las comunidades en las que trabajamos, mediante nuestra experiencia investigadora y nuestro alcance global para desarrollar medicamentos innovadores y facilitárselos a aquellos que los necesitan en todo el mundo”.
“Con la atención global centrada en cómo apoyamos el desarrollo más allá de 2015, ahora es el momento de que el negocio juegue un papel activo en la contribución de un futuro más próspero para África, invirtiendo en infraestructuras, desarrollando habilidades y capacidad para desbloquear el potencial humano y creando empleo. Nuestro objetivo a largo plazo es dotar a África para el descubriento, desarrollo y producción de los medicamentos que necesita”.
Apoyo al desarrollo de nuevos medicamentos para África
GSK invertirá 25 millones de libras –algo más de 30 millones de euros para desarrollar el prer Open Lab de I+D en enfermedades no transmisibles en África. Se desarrollará partiendo del éxito del Open Lab de GSK en Tres Cantos (Madrid), que permite que investigadores independientes trabajen en las instalaciones de GSK, con acceso a sus recursos y conociento, con el objetivo de ayudarles a desarrollar sus propios proyectos de investigación sobre las enfermedades de los países en desarrollo como malaria, tuberculosis y leishmaniasis.
En este nuevo Open Lab de I+D para enfermedades no transmisibles colaborarán científicos de GSK desde el hub de GSK en I+D en Stevenage (Reino Unido) con centros de investigación de toda África, para llevar a cabo investigaciones epidemiológicas, genéticas y clínicas de alta calidad con el fin de incrementar la comprensión sobre estas enfermedades en África. Un comité independiente de científicos y médicos de prer nivel se encargará de supervisar la ejecución de los proyectos de investigación sobre estas enfermedades dentro de un entorno dinámico y conectado en la red de innovación abierta.
El open lab pretende mejorar la comprensión de las variantes de las enfermedades no transmisibles que se dan en África, ejemplo, estudiar la aparente alta prevalencia de la hipertensión resistente a los tratamientos y de los cánceres de mama agresivos en mujeres jóvenes. Se espera que este conociento dé lugar a estrategias de prevención y tratamiento y que permita a los investigadores de instituciones públicas e industria descubrir y desarrollar nuevos tratamientos específicos para las necesidades de los pacientes africanos.
El centro apoyará específicamente la formación de los investigadores africanos que participarán en los diferentes proyectos, construyendo experiencia local y creando una nueva generación de expertos africanos en enfermedades no transmisibles, mientras que inculca una forma de pensar específicamente africana dentro de la propia organización de I+D de GSK.
Transformar el suministro de medicamentos en África
Durante los próxos cinco años GSK buscará asociarse con países africanos para desarrollar capacidad y aptitudes de producción local. Esto conllevará una inversión de 100 millones de libras –alrededor de 120 millones de euros parte de GSK para ampliar su actual capacidad de producción en Nigeria y Kenia y construir hasta cinco fábricas nuevas en África. La compañía está actualmente revisando posibles localizaciones en países como Ruanda, Gana y Etiopía. Los lugares seleccionados se anunciarán en su momento sujetos a acuerdos gubernamentales.
Las nuevas instalaciones se construirán siguiendo los estándares de buenas prácticas de producción (good manufacturing practice, GMP) reconocidos a nivel mundial, y producirán productos necesarios localmente como antibióticos y medicamentos para el VIH (en nombre de ViiV Healthcare) y para enfermedades respiratorias. En principio se centrarán en la producción secundaria con el objetivo de transferir la tecnología, las habilidades y los conocientos necesarios que permitirán la producción local de productos más complejos con el tiempo. Las fábricas crearán una red industrial y de empleo local para mano de obra altamente cualificada proveniente de las comunidades circundantes.
Para apoyar esta ampliación de producción y suministro locales, GSK establecerá 25 cátedras en universidades africanas en áreas como ciencias farmacéuticas, salud pública, ingeniería y logística. Estos roles facilitarán el desarrollo de nuevos cursos, así como prácticas e intercambios estudiantiles, y serán esenciales para asegurar que la capacidad de producción se queda en el continente, lo que ayudará a atraer más inversiones en producción.
GSK también está tomando medidas para mejorar y splificar la cadena de suministro con la creación de centros de abasteciento regional que contribuirán a reducir la escasez de stock, así como de alianzas locales de suministro para facilitar que un mayor número de productos y medicamentos de GSK lleguen a comunidades rurales subatendidas. Estos pasos ayudarán a reducir la dependencia que África tiene de medicamentos tados, asegurando el suministro y reduciendo los costes de producción y transte, lo que con el tiempo debería contribuir a que los precios bajaran.
Creación de una cartera de productos
GSK optizará su tfolio de medicamentos para las enfermedades no transmisibles trabajando en colaboración con su socio local, Aspen, y con los agentes reguladores con el fin de incrementar el registro de medicamentos y vacunas de su tfolio; es el caso del antibiótico Amoxil y del Ventolín para problemas respiratorios, que no están disponibles todavía.
Al mismo tiempo, la empresa continúa trabajando para desarrollar nuevos productos diseñados para satisfacer las necesidades específicas de África, ejemplo a través de su colaboración actual con diversos socios para desarrollar la prera vacuna del mundo contra la malaria y para crear nuevos productos nutricionales enriquecidos con micronutrientes para combatir la desnutrición infantil.
Formar parte del fortaleciento del sistema sanitario
GSK también incrementará su apoyo en la formación del personal sanitario, debido al papel fundamental que desempeñan en la prestación de atención sanitaria básica a muchas comunidades. Como parte de su iniciativa de reinvertir el 20 ciento de cualquier beneficio generado a través de las enfermedades no transmisibles en la propia mejora de la infraestructura sanitaria en esos países, GSK ya está apoyando la formación de 15.000 trabajadores sanitarios en colaboración con las organizaciones no gubernamentales con las que está asociada para finales de 2014.
El compromiso de GSK con la formación del personal sanitario se ampliará ahora incluyendo países de África subsahariana con ingresos más bajo y medios. Durante los próxos tres años, la compañía colaborará con organizaciones benéficas para ayudar en la formación y mejora de habilidades de 10.000 trabajadores sanitarios de Kenia, Gana y Nigeria bajo el paraguas de la campaña One Million Community Health Worker, una iniciativa de Naciones Unidas dirigida el Profesor Jeffrey Sachs. La inversión estará destinada a dar apoyo a las comunidades más marginales o remotas, para ayudar a reducir las desigualdades sanitarias que existen incluso en los países que están creciendo rápidamente.
Estos cambios se han construido sobre las medidas que GSK ha tomado en los últos seis años para modernizar su modelo de negocio y ayudar a mejorar el acceso a los medicamentos en los países en desarrollo. Esto ha llevado a la compañía a litar los precios de sus medicamentos patentados a no más del 25% de los precios establecidos en el mundo en desarrollo y a reinvertir el 20% de cualquier beneficio obtenido en la formación del personal sanitario en los países más pobres del mundo y a llevar a cabo modelos de innovación abierta para la investigación de enfermedades de países en desarrollo.