Esta medianoche ha comenzado la campaña electoral para las Elecciones Europeas del 25 de mayo. Un periodo pre electoral en el que los medios de Comunicación tienen cada vez menos que decir. Desde hace unos años si viene acentuando en los partidos políticos la pésa costumbre de prescindir de los informadores y nada parece que vaya a cambiar en esta otunidad. A pesar de las críticas de las asociaciones de periodistas nos tendremos que acostumbrar una vez más ver a nuestros futuros representantes en señales repartidas los partidos y sin poder ser interpelados la prensa.
Hace exactamente un año Mariano Rajoy comparecía segunda vez ese año en un televisión de plasma. Lo que puede parecer una broma es la triste realidad de la relación de los políticos con la prensa en España. El presidente de Gobierno habló en un televisor de plasma para unos periodistas que no pudieron acceder a la sala donde se producía su discurso. Una práctica poco habitual pero que marcó el punto álgido de la pésa costumbre de los políticos –de todos los partidos de no querer ser preguntados los periodistas.
El caso de Mariano Rajoy es el más paradigmático, pero no el único. Nuestros políticos ya nos tiene acostumbrados a vetar las preguntas en sus ruedas de prensa, a enviar declaraciones ‘enlatadas’ a las televisiones, grabadas sus propias cámaras y equipo de Comunicación, y a restringir el paso a los medios en las caravanas electorales. Situaciones vque ienen siendo denunciadas las diferentes asociaciones de periodistas. Incluso la APM ha vuelto a pedir a comienzos de semana una rueda de prensa diaria con acceso a preguntas para todos los candidatos, pero lamentablemente los protagonistas no están la labor.
Esta medianoche comenzó la campaña oficial para las elecciones europeas y ninguno de los grandes partidos políticos se ha hecho eco de esta petición. Al contrario, de momento seguirán apostando los mítines, la opacidad y el míno contacto con la prensa. Lamentable pero ciert.
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