La alta estructura directiva montada el Partido Popular (PP) tras su llegada a RTVE se ha ido desmontando casi al mismo tiempo que la cadena se ha hundido en la profunda crisis en la que se encuentra actualmente. El últo en abandonar el barco ha sido Leopoldo González Echenique, presidente de la Coración, pero antes lo hizo Ignacio Corrales, director de TVE y Manuel Ventero, director de RNE. Todos menos Julio Somoano y su mano derecha José Gilgado. Coincidentemente los que han sido los más criticados desde todos los estamentos ¿Por qué siguen en sus cargos?
¿Por qué Televisión Española se está hundiendo? La explicación más recurrente es su grave problema de financiación, acentuado la falta de recursos del Ejecutivo, pero también un modelo erróneo de gestión, mala elección de programas y en especial la pérdida de credibilidad de uno de sus pilares históricos: los Informativos.
Históricamente e incluso durante la época de Alfredo Urdaci (2002) los telediarios de la 1 fueron líderes de audiencia y sobretodo referentes informativos, un momento dulce que llegó a su mayor expresión durante la etapa de Fran Llorente, pero que se ha acabado con la llegada de Julio Somoano en junio de 2012.
Podremos tener nuestra opinión sobre la inclinación ideológica de Somoano, pero ha logrado algo que pocos habían conseguido en la historia de la Televisión Pública: poner a todo el mundo incluso al PP en su contra. Los datos son duros e indican que desde su llegada los informativos no paran de caer en espectadores y hoy son la tercera opción detrás de las cadenas privadas, algo pensable hace cuatro años.
Esto, sin contar con la serie de denuncias de su propia plantilla: sindicatos, Consejo de Informativos y la propia redacción que hace una semana realizó un motín espontáneo el tratamiento de la información sobre la salida de Leopoldo González Echenique. En este caso fue particularmente criticada la figura de José Gilgado, el todopoderoso número dos de Somoano fichado de Telemadrid en agosto de 2012, poco más de un mes después de la llegada del nuevo Director de Informativos de TVE.
Y es que el desembarco de José Gilgado en TVE es sintomático. Gilgado tuvo una carrera meteórica en Telemadrid, prero en Onda Madrid, para luego pasar a la dirección de la información local y finalmente convertirse en subdirector de Informativos con directa dependencia del criticado Agustín de Grado. Las quejas de sindicatos y redactores el tratamiento que Gilgado ponía a sus informaciones era constante. Regularmente se le acusaba de manipulación, en especial en casos emblemáticos como el de las sedaciones Hospital Severo Ochoa.
No obstante, y pese a todas estas críticas, Somoano y Gilgado siguen dominando con puño de hierro los Informativos. Y lo hacen a pesar de que toda la estructura que asumió con ellos ha renunciado ¿Por qué siguen en sus cargos a pesar de ser los más criticados? La respuesta es fácil: Somoano es uno de los protegidos de la Vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, presidenta de facto de la CRTVE. Santamaría le ha defendido incluso cuando María Dolores de Cospedal ha pedido su cabeza. Somoano y Gilgado, los supervivientes. Por obra y gracia de Soraya.
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