Cadena SER ha comenzado el año con un perfil informativo bastante bajo. En época electoral y en otros tiempos la emisora de Prisa acostumbraba ser el azote del Partido Popular, pero en los últimos meses han bajado mucho la intensidad. Las críticas apuntan a la derechización de la emisora fruto de los acuerdos entre Juan Luis Cebrián y Moncloa. No obstante, ahora las discrepancias son internas y vienen de la propia redacción, que ven una gran falta de intensidad en pleno año electoral, donde la Ser debería estar liderando la fiscalización al Gobierno.
Para sorpresa de muchos uno de los titulares más optimistas con el dato de paro conocido hoy, fue el de la web de la Cadena Ser que tituló ‘447.900 parados menos’. Históricamente uno de los medios que más ha criticado al Partido Popular ha entrado perfectamente en la lógica de Moncloa y en el mensaje que Mariano Rajoy quiere trasladar a la ciudadanía a través de sus ‘fieles’ medios de Comunicación.
Es sólo un ejemplo de la deriva que viene tomando la Cadena SER en los últimos meses y que ya no sólo preocupa a los oyentes de la emisora, sino que a sus propios periodistas. En privado muchos de ellos se sorprenden por la falta de intensidad de la cadena. Desde siempre se les ha pedido ‘hacer ruido’ y aprovechar el filón como única radio con un perfil ideológico de izquierdas del panorama español, pero ahora no se ve ningún movimiento en este sentido.
Descartan censura, aunque reconocen que a veces se les sugieren enfoques que quizás no estén en la línea de lo que siempre han realizado. Desde fuera muchos colectivos han advertido de esta derechización de la Cadena SER desde hace meses, pero ha sido ahora cuando desde su propia redacción comienzan a advertirlo. Y es que desde comienzos de año detectan un implícito interés de no importunar al Ejecutivo, ya que se aparcan las grandes investigaciones y se evita ‘hacer sangre’ en casos conflictivos como la salida de la cárcel de Luis Bárcenas.
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