Los comité de empresa de Prisa –‘AS’, Asip, ‘Cinco Días’, ‘Ediciones El País’, PBS, Prisa Revistas y Pressprint- se reunieron la semana pasada para abordar la serie de problemas laborales que siguen afectando al Grupo en los últimos meses: goteo de despidos, bajas incentivadas, rumores de ventas, cierres no desmentidos y la sustitución sistemática de trabajadores por otros en peores condiciones son la realidad de todas al empresas de Prisa.
En un comunicado enviado a los trabajadores y que reproducimos a continuación, los representantes de los trabajadores denunciaron estas situaciones, pidieron explicaciones a Juan Luis Cebrián y amenazaron con empezar ‘las acciones que consideremos oportunas’. Lo más grave según este comunicado al que ha tenido acceso prnoticias es la contratación de trabajadores bordeando ‘el fraude de ley’ con ‘becarios, distintos tipos de colaboradores, eventuales, por obra, etc.
COMUNICADO CONJUNTO DE LOS COMITÉS DE EMPRESA: YA ES SUFICIENTE
Los Comités de las distintas empresas de Prisa nos reunimos la semana pasada para poner en común las situaciones en las que se encuentran los trabajadores y las perspectivas de futuro. El goteo de despidos o de ‘bajas voluntarias’; las veladas amenazas de los responsables de Recursos Humanos y algunos directores generales a sus empleados; los rumores de venta o cierre no desmentidos, y, sobre todo, la sustitución sistemática de trabajadores fijos con condiciones laborales decentes por personal al que se contrata bordeando el fraude de ley (becarios, distintos tipos de colaboradores, eventuales, por obra, etcétera), es la tónica general.
Estos compañeros trabajan con unos sueldos bajos, en condiciones precarias, duplicando las jornadas para las que son contratados, sin posibilidad de defenderse y cuya vinculación contractual depende del capricho del director general correspondiente.
Esta situación intolerable se repite en todas y cada una de las empresas de este Grupo que en otros tiempos ha sido el adalid de la libertad de prensa y representante de las ideas progresistas en este país. En la actualidad se ha convertido en un ente sin alma, regido por un grupo de tecnócratas a los que nada importa la calidad de sus propios productos y mucho menos el bienestar de sus trabajadores, mientras las cuentas, ‘sus cuentas’, cuadren a final de año y engorden los bolsillos de los que están más arriba del escalafón. Este año que viene EL PAÍS cumple 40 años y suponemos que no se escatimará en fastos para conmemorar dicha efeméride, mientras se sigue precarizando las plantillas.
Los representantes legales de los trabajadores exigimos a la nueva dirección de Prisa Noticias que ponga fin a estas situaciones. Como siempre, nosotros estamos dispuestos a sentarnos a debatir de estas cuestiones con la empresa, pero no estamos dispuestos a que se sigan pisoteando los derechos de los empleados y precarizando las plantillas de forma tan brutal (en algunas de ellas el número de trabajadores temporales supone el 60% de la plantilla).
También exigimos que se nos informe con claridad y transparencia de la marcha de las negociaciones para la venta del diario Cinco Días, cuyos trabajadores no conocen a día de hoy ni quién ha realizado las dos ofertas que se han recibido para su compra ni las condiciones de las mismas. Los Comités de las empresas de Prisa Noticias reclamamos que en dichas negociaciones se priorice el mantenimiento de los puestos de trabajo y de las condiciones laborales de los trabajadores de Cinco Días.
Ante la situación general de desamparo y desafección en las plantillas, y la incertidumbre que provocan los continuos cambios de estrategia empresarial, los representantes de los trabajadores creemos que ha llegado el momento de decir ¡BASTA! e iniciar las acciones que consideremos oportunas.
Comités de empresa de As, Asip, Cinco Días, Ediciones El País, PBS, Prisa Revistas y Pressprint.
Los diferentes comités de Prisa indican que ‘estos compañeros trabajan con unos sueldos bajos, en condiciones precarias, duplicando las jornadas para las que son contratados, sin posibilidad de defenderse y cuya vinculación contractual depende del capricho del director general correspondiente’. Indican que el grupo Prisa se ha convertido en ‘un ente sin alma, regido por un grupo de tecnócratas a los que nada importa la calidad de sus propios productos y mucho menos el bienestar de sus trabajadores’.
Y agregan que no están dispuestos ‘a que se sigan pisoteando los derechos de los empleados y precarizando las plantillas de forma tan brutal (en algunas de ellas el número de trabajadores temporales supone el 60% de la plantilla)’. ‘Ante la situación general de desamparo y desafección en las plantillas, y la incertidumbre que provocan los continuos cambios de estrategia empresarial, los representantes de los trabajadores creemos que ha llegado el momento de decir ¡BASTA! e iniciar las acciones que consideremos oportunas’, concluyen.
