Una iniciativa europea desarrollada por Daiichi Sankyo con ocasión de su apoyo al ‘Día Mundial del Ictus’ pretende concienciar sobre la estrecha relación de enfermedades cardiovasculares como la fibrilación auricular y la hipertensión arterial con el riesgo de sufrir un ictus. La campaña ‘Haz que tu corazón se sienta bien’ pretende llamar la atención de profesionales sanitarios y sociedad sobre estas enfermedades ya que se estima que en todo el mundo 33,5 millones de personas padecen fibrilación auricular. Por su parte, la hipertensión arterial es uno de los principales riesgos para la salud a nivel global, ocasionando hasta 9,4 millones de muertes anuales.
‘Haz que tu corazón se sienta bien’ hace hincapié en que la presión arterial alta y la fibrilación auricular están interconectadas, ya que hay estudios que sugieren que la hipertensión arterial es uno de los principales factores para el desarrollo de fibrilación auricular en el futuro. Las personas con fibrilación auricular tienen un riesgo cinco veces mayor que el de la población general de sufrir un ictus. Es más, cuando en un paciente coexisten la fibrilación auricular y la hipertensión arterial, se incrementa aún más el riesgo de ictus.
Según datos estadísticos europeos, la prevención puede desempeñar un papel fundamental en la reducción de la mortalidad ocasionada por hipertensión arterial. Una buena oportunidad en este sentido podría darse mediante una mejora del tratamiento, por ejemplo, con el uso de combinaciones a dosis fijas de antihipertensivos. En Europa, solo entre el 32 y el 46% de los pacientes presenta un valor de presión arterial dentro de lo normal, < 140/90 mm Hg lo cual sugiere que hasta un 70% de los mismos no están suficientemente controlados.
Según algunas estimaciones, reducir la presión sistólica de la población en 5 mm Hg mediante la prevención, los cambios en el estilo de vida, tratamientos farmacológicos eficaces y otras medidas podría reducir las muertes por ictus en un 14%. Por este motivo, Daiichi Sankyo anima a los profesionales sanitarios a trabajar de forma conjunta para mejorar el tratamiento de la hipertensión y la fibrilación auricular.