El cuidado de la piel, como estamos comprobando, es más complejo de lo que parece. Así, y tras aprender a hidratar las más grasas (que por su concepto, much@s desconocían como hacerlo hasta que llegamos nosotros) y las secas (en este caso, es más sencillo ya que carecen precisamente de esos nutrientes que aportan las leches y cremas hidratantes), nos paramos en un tipo que une ambas, lo que la hace especial… ¡Y algo más compleja de mantener radiante! Hablamos de las… ¡Pieles mixtas!: “Es un tipo de piel muy habitual, propia de un mayor número de personas que durante su adolescencia tienen la piel más grasa, la cual se equilibra y se hace mixta”. Nos comenta nuestra experta, Judith García, del blog Maquillaje y otras Hierbas. Así… ¿Dónde radica el mayor de los problemas?: “O tendemos a limpiarlas demasiado con productos propios de una tez más grasa, y las resecamos, o les aplicamos unos excesivamente hidratantes… y las engrasamos”.
Este dilema generado por estas pieles mixtas, tiene una solución algo tediosa pero efectiva: “Utilizar dos tipos de limpiadores. Por la mañana, podemos utilizar uno en forma de gel, espuma o jabón (con el que eliminaremos los restos grasos que se acumulan durante la noche), y por la noche con una leche desmaquilladora”. Con esto, conseguiríamos que la piel no se resecase, a la vez que no adquiriese grasa adicional. Además, y en el mismo orden: “Podemos incluir las cremas hidratantes, por la mañana libre de aceite y por la noche una menos rica”. Por último, y antes de despedirnos, Judith nos recomienda un proceso que está de moda: “Yo os quería recomendar los Multimasking. Se trata de combinar dos mascarillas al mismo tiempo”. Es muy bueno para este tipo de pieles, mixtas… ¿Te apuntas?
Seguiremos Informando…