Este martes probablemente el pleno del Congreso de los Diputados admitirá a trámite la proposición de ley del PSOE para reformar el modelo de elección de la cúpula de RTVE. En el hemiciclo ha trascendido que este este partido contaría con los apoyos necesarios para sacar adelante esta iniciativa, por lo que en algunos círculos se da como hecha. No obstante, y pese a que el PSOE quiere que sea de aplicación inmediata, el engorroso trámite parlamentario no la haría efectiva hasta otoño de este año y ello, sin garantizar la elección de un nuevo Presidente.
La propuesta que se votará mañana incluye básicamente volver al modelo instaurado por José Luis Rodríguez Zapatero y que obligaba al gobierno de turno a buscar un acuerdo parlamentario en torno a los miembros del Consejo de Administración de RTVE y de su Presidente. Mañana se votará volver a doce miembros, recortados a nueve por el Gobierno de Mariano Rajoy. De estos doce, ocho serán elegidos por el Congreso de los Diputados –dos a propuesta de los dos sindicatos con mayor representación en RTVE- y cuatro por el Senado.
La elección de todos estos miembros – personas de reconocida cualificación y experiencia profesional, según ha dicho en PSOE en su propuesta- se realizaría por dos tercios de la Cámara correspondiente y dentro de estos doce consejeros electos se elegiría al Presidente de la Corporación y del Consejo. Estos candidatos deberán comparecer en audiencia pública en el Congreso y el Senado. Finalmente, el nuevo Presidente de RTVE deberá ser elegido por dos tercios del Congreso de los Diputados.
En otoño estaría aprobada definitivamente esta inciativa sobre RTVE
La argumentación del PSOE a este cambio es que la reforma realizada por el Partido Popular a la elección del Presidente de RTVE nada más comenzar la legislatura “les permitió designar como presidente de la Corporación a una persona cercana a la vicepresidenta del Gobierno e iniciar un camino de desmantelamiento del modelo anteriormente aprobado”. En el modelo vigente solo se necesita mayoría simple en segunda votación para elegir al Presidente de RTVE. Bajo esta orgánica se ha elegido a Leopoldo González Echenique en 2012 y tras su renuncia a José Antonio Sánchez, que tiene mandato vigente hasta septiembre de 2018.
El PSOE y el resto de partidos han movido ficha luego de las muchas protestas de los propios trabajadores de RTVE que vienen denunciando de manera insistente la manipulación política del canal de televisión público. Es por ello que la aprobación de esta propuesta podría significar el primer paso para una nueva RTVE. En cuanto a los apoyos parlamentarios, todas las informaciones indican que Podemos y Ciudadanos votarían a favor del proyecto, lo que garantizaría su aprobación por al menos 183 votos (84 del PSOE, 67 de Podemos y 32 de Ciudadanos) y el comienzo de un trámite que debería acabar con un nuevo presidente en el sillón de RTVE.
No obstante, no será un camino fácil. En primer lugar están los tiempos parlamentarios que incluyen visitas a comisiones y un viaje al Senado. Esto implica cuanto menos tres o cuatro meses de tramitación con una aprobación probable como pronto para otoño de este año. El PSOE quiere que la aplicación de esta reforma se haga de manera inmediata, lo que implicaría comenzar a buscar un candidato de consenso para que sustituya a José Antonio Sánchez, quien no tiene el apoyo de la Oposición.
El PP quiere que Sánchez termine su mandado en RTVE
Este candidato deberá contar con al menos el apoyo de dos tercios del Congreso situado en 233 de los 350 votos. De esta manera, la actual aritmética parlamentaria hace imposible sacar adelante un candidato sin el apoyo del Partido Popular. Incluso si todos los partidos del hemiciclo se uniesen –algo casi imposible- el voto contrario del PSOE bloquearía a cualquier candidato. Es por ello que no extraña que el PSOE haya señalado en los últimos días que esperan que el PP se sume a esta iniciativa, lo que comenzaría a allanar el camino para buscar a un nuevo Presidente de RTVE de consenso.
El problema es que el PP está cómodo con el actual modelo de RTVE, una dinámica que ellos han impuesto y que hasta el momento les ha permitido controlar con puño de hierro la televisión pública. En el partido de Gobierno tampoco ven con ojos idílicos los tiempos del PSOE en RTVE cuando Fran Llorente era el jefe de informativos. De hecho, desde el PP se dice en privado que buena parte de los trabajadores de RTVE que protestan por la pérdida de independencia están teledirigidos por Ferraz. Por eso ven en esta nueva proposición de ley el interés del PSOE de volver a controlar RTVE.
Por otro lado, en el PP saben que ya no tienen mayoría y que sería difícil seguir manteniendo el control de RTVE en solitario, pero su intención es que José Antonio Sánchez termine su mandato. En esta línea no verían con malos ojos que se retrasase su sustituto si es que los candidatos propuestos por otras formaciones no están en la línea de lo que ellos buscan. Para el PSOE es fundamental el apoyo del PP, pero esto pasa por buscar un candidato de consenso de verdad, un técnico que no tenga que ver ni con el pasado ni el presente partidista de Ferraz. Del lado, del PSOE y de Podemos y Ciudadanos opinan exactamente lo mismo y por tanto no apoyarían a nadie relacionado con el PP. Se avecinan meses complicados y de muchos tiras y aflojas.
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