Ahorrar dinero, progresar profesionalmente y viajar son las prioridades de las mujeres españolas. Así lo revela la encuesta ‘Prioridades de la mujer antes de ser madre’, realizada por HRA Pharma con motivo del Día Mundial de la Anticoncepción, en la que se demuestra que actualmente las mujeres anteponen estas cuestiones a la maternidad. Concretamente, al 78% de las solteras le preocupa quedarse embarazada y considera que el embarazo afectaría a su vida social y laboral (frente al 66% del total).
Así, los resultados muestran que el 67% tiene miedo a perder oportunidades laborales cuando está embarazada, siendo las más preocupadas las mujeres de la Generación Z (75%) y Millennial (64%). Ante esta situación, el 58% de las mujeres valoraría la posibilidad de recurrir a la píldora del día después (PDD) para evitar un embarazo no planificado, de la cuales, el 27% recurriría “seguro” a su uso frente al 31% que lo harían “probablemente”.
A pesar de querer evitarlo, el 22% de las mujeres ha tenido una relación de riesgo en el último año (excluyendo aquellas que se encuentran en busca de un embarazo o en una relación estable). El perfil de las estudiantes es el que más practica relaciones sexuales sin protección (37%), seguidas del de mujeres que ya han sido madres anteriormente (26%). Un 21% de ellas pensó que la posibilidad de quedarse embarazada era escasa y un 18% mantuvo relaciones de riesgo porque no disponían de medios anticonceptivos disponibles en ese momento. En este sentido, es importante destacar que un 21% confió erróneamente en su ciclo menstrual para eludir los días fértiles y el 14% de las mujeres utilizó la marcha atrás por considerarla un método seguro.
La píldora del día después, una segunda oportunidad
Ante las relaciones sexuales sin protección o con un fallo en el método anticonceptivo utilizado existen segundas oportunidades como la píldora del día después (PDD). Se trata de un método anticonceptivo de emergencia en caso de que se haya mantenido una relación sexual sin protección o bien se haya producido un fallo u olvido en el método anticonceptivo regular.
Acorde con los datos extraídos de la encuesta, el 58% de las mujeres sí utilizaría la PDD para evitar un embarazo no planificado. Concretamente, el 28% de ellas la ha tomado alguna vez, de las cuales el 10% lo ha hecho en los últimos 12 meses, siendo más consumida por mujeres de entre 18 y 24 años y entre 30 y 34, incluyendo aquellas que ya han sido madres.
En contraposición, un 17% de las mujeres rechaza el uso de la píldora anticonceptiva de emergencia por diversos motivos. De hecho, si nos centramos en los mitos, todavía el 47% cree que se trata de una bomba hormonal y un 57% de ellas la considera un método abortivo.
En palabras del Dr. Ezequiel Pérez Campos, Jefe del Servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital de Requena (Valencia) y Patrono de la Fundación Española de Contracepción, “aunque la píldora del día después sí es conocida por una mayoría de mujeres, siguen existiendo muchas falsas ideas sobre todo respecto a su potencial de provocar importantes efectos secundarios o respecto a su mecanismo de acción”.
Y es que, a pesar del libre acceso a la anticoncepción de emergencia, los prejuicios y mitos, derivados del desconocimiento, continúan presentes en la percepción de las mujeres españolas, lo que condiciona su sexualidad e incluso su escala de prioridades. “La falta de información o la información incorrecta condiciona actitudes y actuaciones equivocadas en mujeres que pueden ser origen de frustración en su actividad sexual o de embarazos no planificados que conduzcan, en muchos casos, a interrupciones posteriores”, concluye el Dr. Pérez.
Todavía existen muchos mitos en materia de anticoncepción, prosigue este experto, que apunta a desterrar tales como que “la píldora engorda, provoca infertilidad, cáncer, aumento del vello y otros graves efectos secundarios. Respecto a la píldora del día después, muchas mujeres, e incluso algunos profesionales, siguen pensando que es abortiva y que es un peligroso “cóctel hormonal” con repercusiones serias en la salud de las mujeres”.
Precisamente es la existencia de estos prejuicios todavía existentes en la sociedad los que llevan al 75% de las mujeres a reconocer que aún les da vergüenza pedir la píldora del día después. En palabras de la Dra. Mila Cahue, psicóloga especialista en relaciones de pareja, “hay miedo de que se las tome como promiscuas, insensatas o imprudentes, o gente que pueda pensar que son personas poco éticas porque todavía piensan que es un aborto”.
Es por ello que todavía existe la necesidad de normalizar los contextos en los que las mujeres han de recurrir a la píldora del día después y, sobre todo, ser conscientes de que “es una opción responsable, y siempre va a haber profesionales en el mundo de la farmacia, psicología, medicina, etc., con los que poder hablar y quienes te van a comprender”, concluye Mila. Sin embargo, y pese a todos los mitos, el 49% de las mujeres que ya ha sido usuaria de la PDD afirma que recomendaría a otras mujeres su uso ante una situación de emergencia.
