El diario prnoticias.com entrevista a Marcela Ospina, directora de Comunicación de Oxfam Intermón. Tras los hechos publicados por The Times, en los que se involucra a altos directivos de Oxfam en el pago de prostitutas tras el terremoto de Haití en el año 2010, la ONG española ha recibido alrededor de 1.200 solicitudes de baja, resultado directo de la crisis de reputación que la información ha generado en la organización.
La directora de Comunicación asegura que el caso de Haití ha supuesto un reto en la comunicación de la organización. Ospina ha expresado su desolación en su nombre en nombre de toda la organización y asegura que están “avergonzados” con lo sucedido, aunque al mismo tiempo “muy orgullosos del trabajo realizado en muchísimos países del 99% de las personas que trabajan en Oxfam”. “Desde Oxfam hemos contactado con toda nuestra base social, hemos enviado correos electrónicos explicándonos”, ha dicho la dircom de Oxfam Intermón, que ha “abierto las puertas” de su organización a todos los medios de comunicación concediendo “más de 50 entrevistas”.
Con respecto al tiempo transcurrido entre la publicación de los hechos y la rueda de prensa, la dircom de la ONG explica que el proceso de las explicaciones comenzó de manera inmediata a través de varios comunicados colgados en la web y redes sociales, además de comunicaciones directas con sus stakeholders, al mismo tiempo que empezaban a contestar a todos los medios. De la misma manera la organización estuvo “chequeando hasta dónde permite la Ley de Protección de datos para entender sus límites”, para asegurarse de que la información emitida desde la información no vulneraba la legislación, ni “los derechos de ninguna persona”.
Con respecto al sistema de comunicaciones que Oxfam Intermón quiere establecer con otras organizaciones humanitarias, para evitar la contratación de personas implicadas en casos de acoso, y que la Ley de Protección de Datos limita, Marcela Ospina ha señalado que lo primero que están haciendo desde la ONG es ponerse en contacto con otras organizaciones y con personas que puedan dar una respuesta de tipo jurídico para ver la viabilidad de las medidas. También ha querido incidir en que la organización está abierta a “que haya cambios en las regulaciones” lo que implica conversaciones con la Administración.
Marcela Ospina cree que “hemos tenido la comunicación que la sociedad esperaba de nosotros: una comunicación cercana, una comunicación que se basara en la honestidad, también en la humildad, y también la voluntad de cambios y mejoras”. Con respecto a las palabras de la directora regional de Oxfam en Asia, Lan Mercado, acerca de que el silencio es el verdadero riesgo reptuacional, Ospina ha dicho que para lo que ellos trabajan es para que se utilicen los mecanismos internos de denuncia “para que esto se sepa y aflore. Jamás hemos sido partidarios de una política de encubrimiento, ni de silenciar cuando se vulneran los derechos de las personas, esa es nuestra razón de ser”.
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