Cerca de 219.000 familias españolas, clientes de Endesa, se han beneficiado de la renovación automática del bono social desde que el mes de abril entró en vigor el Real Decreto Ley 6/2022. Esto sitúa la cifra de beneficiarios de esta ayuda en casi 447.000 hogares, unos 26.000 más que a 31 de diciembre de 2021 y 75.000 más respeto al año en que estalló la pandemia.
Endesa atribuye buena parte de este crecimiento al hecho que todas aquellas personas beneficiarias de este descuento —salvo las familias numerosas, que están sujetas a la vigencia de su carné— no tengan que tramitar ahora una solicitud de renovación cada 2 años para verificar que siguen cumpliendo los criterios de asignación definidos por el Gobierno, ya que desde la energética se hace directamente la comprobación con el Ministerio de Transición Ecológica para saber si el hogar en cuestión puede seguir percibiendo el descuento en la factura eléctrica.
Para aquellos que gozaban de la ayuda antes de la entrada en vigor de la normativa tendrán una prórroga automática de dos años tras finalizar el período de percepción. Dos meses antes del siguiente vencimiento, Endesa les avisará para que puedan presentar la solicitud y la nueva documentación acreditativa de acuerdo con los nuevos requisitos. A partir de ese momento las renovaciones también pasarán a ser automáticas cada dos años, siempre que se cumplan las condiciones.
Más allá de las renovaciones, Endesa prevé que el colectivo de beneficiaros del bono social siga creciendo en los próximos meses con la nueva categoría que el Gobierno impulsó a finales del mes pasado y que se regula en el Real Decreto Ley 18/2022: el bono social de justicia energética, dirigido a hogares con bajos ingresos particularmente afectados por la crisis energética. Esta nueva categoría supone la aplicación de un descuento del 40% sobre el precio voluntario para el pequeño consumidor (PVPC) y estará vigente hasta el 31 de diciembre de 2023.
Podrán acogerse a esta ayuda para su vivienda habitual las personas que tengan una renta igual o inferior a 2 veces el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM) de 14 pagas y superior a 1,5 veces el IPREM de 14 pagas. A modo de ejemplo, en 2022 podrán acogerse al nuevo bono de justicia energética un adulto con una renta inferior a 16.213 euros anuales o una familia de cuatro miembros con una renta inferior a 26.751 euros anuales.
Otras medidas destacadas del nuevo Real Decreto Ley 18/2022
La entrada en vigor del nuevo Real Decreto Ley 18/2022 también amplía los descuentos y los prorroga hasta 31 de diciembre de 2023. Así, para los consumidores vulnerables la ayuda pasa del 60% al 65%, mientras que para los que se encuentren en situación de vulnerabilidad severa se amplía en un 10% más, pasando del 70% al 80%.
Además, también se incrementa el número de kilovatios hora (kWh) sobre los que se aplican estas bonificaciones, por lo que el volumen de energía anual sujeta al descuento se incrementa en un 15% y de forma proporcional a las personas que convivan en la misma vivienda. Por ejemplo, en un hogar donde viven una o dos personas, los kWh bonificados son ahora de 1.587 kWh año (antes eran 1.380 kWh); mientras que en una unidad de convivencia formada por cuatro personas es de 2.698 kWh (frente a los 2.346 kWh antes del cambio regulatorio).