La Secretaria de Estado de Comunicación, Carmen Martínez Castro, respira tranquila esta semana. Los datos del CIS siguen posicionando al PP como la primera fuerza política, pero lo realmente interesante para Moncloa es que ha dejado de ser noticia en los medios de Comunicación a favor de la pelea entre ciudadanos y Podemos y la investidura de Susana Díaz.
Carmen Martínez Castro sigue siendo el mayor apoyo de Mariano Rajoy. Desde el Palacio de la Moncloa la Secretaria de Estado de Comunicación trabaja duro en la estrategia que consiga posicionar a Mariano Rajoy como el próximo presidente del Gobierno. Rajoy y Martínez Castro trabajan de espaldas a Génova, donde tras el batacazo del PP en las elecciones autonómicas de Andalucía muchos vieron el momento perfecto para ‘quitar de en medio a Rajoy’.
A pesar de la jugada de Susana Díaz para ‘revalidar su poder’ en Andalucía no ha salido del todo bien al Partido Popular y que las elecciones autonómicas no auguran grandes victorias –el PP gobernaría en mayoría absoluta solo en Castilla y León- según el barómetro preelectoral del CIS , la principal guerra – las elecciones nacionales- aún no está perdida. Así el PP se mantiene a la cabeza aunque con el PSOE pisándole los talones. Un 25,6% de los votos del PP, frente a un 24,3% del PSOE.
Desde Moncloa la estrategia desde finales del año pasado es clara: comunicar la recuperación económica a toda costa y no entrar en el debate sobre los dos nuevos partidos –Podemos y Ciudadanos-. Esta estrategia se ha quedado en los muros de Moncloa y los candidatos autonómicos y a las alcaldías han decidido ‘ir por libre’ con más o menos acierto. Ejemplos como los de Monago o Cifuentes son suficientes para vislumbrar la disparidad de opiniones y estrategias dentro del partido.
Aunque la imagen de Mariano Rajoy sigue estando por los suelos, según el CIS suma una nota de 2,49, dato que no obtenía desde enero de 2013, lo que indica una tímida, pero al fin y al cabo, subida.
Carmen Martínez Castro cuenta con otro punto a su favor en la estrategia que consiga devolver a Mariano Rajoy a la Moncloa: el tiempo. Aún se desconoce cuándo el Presidente del Gobierno convocará las elecciones generales. Este hecho coloca a Martínez Castro en una posición privilegiada para articular la estrategia de Comunicación adecuada. Además, queda el verano, tiempo suficiente para enterrar en el olvido mediático a fantasmas de Rajoy como Rodrigo Rato o Luis Bárcenas.
Por otro lado, aunque no menos importante, recae en el ruido mediático que las dos nuevas formaciones políticas están protagonizando. La guerra abierta entre Podemos y Ciudadanos está teniendo como principal beneficiario en los medios al PP, que ha conseguido dejar de estar en centro de la atención mediática y ralentizando el consiguiente desgaste. Eso también se ha visto reflejado en el CIS, y es que aunque el PP continúe descendiendo y se quede cerca del empate con PSOE en intención de voto.
El único punto caliente que podría arruinar los planes de Martínez Castro serían un hipotético pacto en las autonomías del PSOE y Podemos. Ambas formaciones han dado señas de acercamiento en los debates de investidura del Parlamento Andaluz, aunque muy previsiblemente no habrá movimiento de ficha de la nueva formación de Pablo Iglesias hasta las elecciones autonómicas del 24 de Mayo. Hasta entonces ‘Alea iacta est’.
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