Las exigencias tácitas del líder de Ciudadanos, Albert Rivera, al coro con barones del Partido Popular pidiendo que Mariano Rajoy eche un paso atrás en la política para poder llegar a un acuerdo con Ciudadanos y el PSOE, podrían haber despertado las ansias de salto a la política nacional de Cristina Cifuentes que se postula ante la imagen pública, el partido, incluso ante sus adversarios políticos, como la mano amiga del PP para un posible gobierno de una gran coalición. Por lo pronto, Cifuentes ha decidido renovar a su equipo de comunicación en la Comunidad y ha comenzado una campaña de comunicación en los medios ¿El objetivo? Sólo ella lo sabe.
De títeres por Madrid a lo Manuela Carmena, con Pedro Sánchez –el enemigo número uno del PP– en el Congreso de UGT, gobierno con apoyo de Ciudadanos, reina de Instagram y de tour mediático, con visita a las hormigas de Pablo Motos en El Hormiguero de Antena 3. Cristina Cifuentes es el verso suelto del PP. Mientras el núcleo duro del partido cierra filas en torno a Mariano Rajoy, la presidenta de la Comunidad de Madrid es hasta el momento de las pocas, por no decir la única cara del PP, que mantiene más contacto con los adversarios que casi con sus compañeros de partido. Esta semana colgaba en su perfil de Instagram, donde no hay día que deleite a sus seguidores con una instantánea, una foto con el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, justo en plena guerra por el poder del gobierno central. ¿Casualidades o un acercamiento intencionado? Cualquiera pudiera pensar que Cifuentes podría ser la única capaz en el PP de unir las fuerzas de Ciudadanos, PP y PSOE. La estrategia de comunicación de Cifuentes así lo desvela.
El que más tajante ha sido respecto a la imposibilidad de gobernar con Mariano Rajoy en un hipotético gobierno de coalición ha sido Albert Rivera, que ha mostrado su rechazo frontal a un pacto de Estado si en él está Mariano Rajoy. Tampoco el líder del PP lo está teniendo fácil entre sus filas. Así, estos días el ex presidente de Murcia, Alberto Garre, también pedía a Rajoy que se echase a un lado para conseguir un gobierno estable.
En este escenario, ya son muchos los que se preparan para dar un paso al frente en una hipotética renuncia de Rajoy, pero también ante un posible congreso del PP, prometido desde hace meses y de donde saldría un nuevo líder del partido. Lo cierto es que Soraya Sáenz de Santa María parece haber perdido apoyos en los últimos meses y se muestra más reacia que nunca a soltar la mano de Rajoy.
El contexto, por tanto, parece favorable a una renovación del partido, exigida desde dentro y también requisito necesario para llegar a ningún tipo de acuerdo. Esa renovación, a todas luces, pasa por la renuncia de Rajoy.
Ayer @ccifuentes confesó que sólo tenía un selfie con Petancas, pero lo solucionó durante la publi 😉 pic.twitter.com/955umY6IWz
— El Hormiguero (@El_Hormiguero) 9 de marzo de 2016
En plena crisis en la Comunidad de Madrid por la trama Púnica, que nadie se sorprenda por los giros en la comunicación de Cristina Cifuentes. Para asegurarse el terreno y una impecable imagen pública, Cifuentes ha decidido confiar su comunicación a Nayra Ortega Granados. La nueva jefa de prensa del PP de la Comunidad de Madrid sustituye a Ruth Ruíz 4 meses después de su nombramiento en el cargo. Ruiz había sido anteriormente responsable de comunicación de la Consejería de Sanidad en la Comunidad de Madrid. La nueva responsable de comunicación de Cifuentes en la Comunidad ya ha trabajado con anterioridad en el Gabinete de Comunicación del Grupo Parlamentario Popular de la Asamblea de Madrid, por lo que tiene amplia experiencia en estos lares.
Mientras tanto, Cifuentes continúa posicionándose mediáticamente como la cara diferente del PP, que gusta tanto a los simpatizantes del partido como a los adversarios. Sin embargo, lo cierto es que la última palabra sobre su posible ascenso a la política nacional depende de Mariano Rajoy y sus movimientos…. Toda una incógnita.
Seguiremos informando…
